«Fue un buen viaje», sintetizó Marat Safin, de 29 años y ex número uno del mundo, tras caer ayer en la primera ronda de Dubái, una de sus escalas antes de despedirse definitivamente del tenis a final de año.
El talentoso francés Richard Gasquet, 26 del ránking mundial, batió al ruso, 25, por 6-3, 5-7 y 6-3 en un entretenido encuentro jugado en la cancha central del Aviation Club.
¿No hay alguna posibilidad de que siga? Safin, que el año pasado incluso llegó a anunciar que no jugaría en el 2009, para luego rectificar, sonrió y negó. «Me mantengo en lo que dije, este es el último año», aseguró.
El jugador tiene claro cuál quiere que sea la sede de su último punto. «Me gustaría despedirme en París, donde hice mi mejor tenis y gané la Davis», explicó.
Mirando hacia abajo y hablando veloz, Safin se paseó por todas las posibilidades que le ofrece el futuro. No definió claramente qué hará, pero sí lo que no hará.
«¿Entrenador? «No, no, no... Jugar y enseñar son cosas completamente diferentes». ¿Comentarista de televisión? «Tampoco, hay mucha gente que puede hacerlo mejor que yo». ¿Capitán de Copa Davis? «Hay alguien bien sólido en esa silla» -el poderoso Shamil Tarpishev, presidente del Comité Olímpico Ruso y miembro del COI. ¿Empresario? «Quizá. Y hasta podría colaborar con la ATP», sugirió.