El tesoro está en la primera palada

DEPORTES

Perucho y Craviotto, pendientes de que se instale en Trasona un sistema automático de salida, clave en los 200

15 ene 2010 . Actualizado a las 03:24 h.

En los 200 metros, la primera palada puede cavar la propia tumba. O enterrar a los rivales. Por eso en su camino a Londres 2012 el gallego Carlos Pérez Rial y el catalán Saúl Craviotto quieren entrenarse con un sistema automático de salida como el que se emplea en competición de élite. Se lo habían pedido a los Reyes a principios de enero. Y parece que el regalo puede llegar. En el embalse asturiano de Trasona, su lugar de entrenamientos, se celebrarán los Campeonatos de Europa del 2010. Para la cita continental estaba previsto que se alquilara este mecanismo, pero finalmente parece que los presupuestos incluirán la instalación de un sistema fijo.

Perucho y Craviotto son los campeones olímpicos en K-2 500 metros. Pero la inclusión de la regata de 200 en el programa olímpico les abrió un nuevo horizonte. Porque ya han demostrado que son letales en las distancias cortas. Pero necesitan pulir la salida. «Es arranque es el 80% de la prueba. Si lo haces mal, olvídate de la medalla», asegura el cangués. «No estamos habituados a ese sistema, porque solo lo usamos en competiciones. Ahí puedes perder una regata que suele durar unos 32 segundos. No solo por el tiempo que cedes, también porque psicológicamente llevas el lastre de no haber comenzado bien», indica el entrenador de los campeones, Miguel García.

Un único cepo

El técnico explica que el próximo domingo irán a Sevilla para realizar allí dos concentraciones de quince días. «El problema es que el sistema de salida es siempre de nueve calles. Y en Sevilla no podemos montarlo así, porque cortaríamos el río y allí navegan también embarcaciones de recreo», señala García. La solución sería adaptar el mecanismo, reducirlo al equivalente de una sola calle, con un único cepo. Quizás tengan que improvisar una solución artesanal un tanto rudimentaria.

De momento, trabajan las salidas a la antigua usanza, según explica el entrenador. «Con el barco parado, con la proa en una boya y arrancando a la voz de ya, sin tener el cepo delante, sin el sonido ni el estímulo visual necesario. Así no es lo mismo», dice García.

«Si no tienes ningún agarre, cuando clavas la pala en el agua siempre se desplaza hacia delante, no reacciona nunca como lo haría en una regata oficial», se lamenta Pérez Rial.

Perucho y su técnico señalan que, en estas condiciones, se encuentran en desventaja con respecto a otros piragüistas que se entrenan en pistas en las que se celebran regatas internacionales y que, por ello, cuentan con un sistema de salida propio. «Los piragüistas húngaros, por ejemplo, se entrenan en las instalaciones de Szeged, donde se disputan grandes competiciones. Y allí disponen de todos los medios necesarios», apunta el palista. «Ves grabaciones de regatas y compruebas que otros kayakistas de Hungría, Alemania, Bielorrusia o Italia reaccionan más rápido porque están habituados», coincide García.

«Trabajando muy a gusto»

Señala que más adelante dedicarán más tiempo a la salida, midiendo los tiempos de reacción y «machacándose más». Asegura que sigue trabajando «muy a gusto» junto a Craviotto, Miguel García y Fran Llera. Pero los dos campeones olímpicos y su entrenador siguen pensando en distintas posibilidades para poder ensayar el pistoletazo de Londres 2012.