Miguel Ángel Jiménez: «A la cena del Masters llevaría una paella y muchos percebes»

Paulo Alonso Lois
Paulo Alonso Lois REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

El español analiza el primer grande del año, que se perderá por lesión

08 abr 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Desde que pisó en 1995 por primera vez Magnolia Lane, la antesala del Augusta National, Miguel Ángel Jiménez (Churriana, Málaga, 1964) se dio cuenta de que quería hacer de cada participación en el primer grande del año un auténtico acontecimiento. Disputó 14 veces el mítico torneo de Georgia, con todo su ceremonial. Allí se llevó a familia y amigos varias veces, para paladear cada segundo de una experiencia tan singular. El jueves faltará al inicio, por culpa de una lesión. «El Masters es muy especial por el campo y por el torneo. Es una pena faltar. El ambiente es fantástico y se pasa muy bien. Y luego está la competición por dentro; se vive como solo se viven los grandes».

-De todo el ritual de Augusta. ¿Qué es lo que más le impactó la primera vez que fue, en 1995?

-Por toda la mitología que tiene, el primer día se me hizo un nudo en el estómago, y ya no se me fue en toda la semana. El campo ya lo conocemos, es difícil, con greenes rápidos, pero las sensaciones son las que te impactan.

-¿Y qué es lo que más le gusta?

-Todo lo que hay alrededor. Llegas allí y esa tensión que sientes dentro es la que te gusta y te motiva. El campo reúne un público muy entendido, que disfruta. Luego me gusta estar con mis amigos, pasar el tiempo todos juntos después de jugar. Uno comenta el día, otro cocina, otro saca la guitarra... Disfruto con todo lo que ocurre.

-¿Y del recorrido?

-Es más fácil preguntar qué no te gusta. Del campo te encanta todo. Recuerdo haber ido el jueves a primera hora de la mañana para ver a Gene Sarazen en la salida de honor. Ahora ves hacerla a Nicklaus, Palmer y Player. Se reúne allí gente de todas las edades en el homenaje en el tee del 1. Pegan ese golpe y se van, claro. Hay una cantidad de cosas preciosas.

-¿Suele ir a primera hora a ver la salida de honor del jueves?

-Claro. Puedes ver a los mejores de todos los tiempos, disfrutar de un Arnold Palmer. ¿Quién tiene ocasión de ver eso? Al principio me levantaba temprano e iba a verlo. Si estás allí y no vas, es que te estás perdiendo algo del Masters.

-¿Qué elegiría como menú para la cena de campeones?

-Primero tengo que ganar en Augusta. Pero a la cena del Masters llevaría una paella cocinada por mí y encargaría muchos percebes de Galicia, que me mandaríais. Como a muchos les darían asco, los comería yo todos (ríe).

-¿Cuáles son sus favoritos?

-Tiger.

-Tiger, y luego el resto.

-Tiger, y luego el resto. Así lo veo yo. Hay muchos jugadores con posibilidades, por supuesto. Hablaremos de Sergio García, Phil Mickelson y todo el mundo. Pero «Tiger is back».

-¿Volverá a ser el de antes?

-Sí, sí. Está empezando a meter putts otra vez, y su juego está de nuevo arriba. Creo que ya no habrá quien lo saque de ahí en mucho tiempo.