El Grupo Eulen es el único equipo de LEB Plata que se mantiene invicto en su feudo
21 dic 2013 . Actualizado a las 07:00 h.El Peixe Galego buscará esta tarde en Ávila ante el Grupo Eulen Carrefour (19 horas, Multiusos Carlos Sastre) acabar con la condición de invicto del bloque castellano en su feudo. Después de caer en casa ante el Prat, los de Javi Llorente pretenden volver a poner a su favor un balance de victorias y derrotas que ahora mismo se encuentra al 50 % ante un rival que cuenta con los mismos puntos que los marinenses, por lo que el ganador del duelo de hoy tendrá el aliciente de despedir el año situado en la zona alta de la tabla y dejar prácticamente asegurada la permanencia cuando resta más de la mitad de la liga.
Enfrente, el Peixe Galego tendrá a un equipo con dos caras, aunque todo apunta a que mostrará la buena ante los marinenses. De hecho, la infalibilidad de los de David Mangas en su cancha contrasta con su debilidad como visitante, donde todavía no ha conseguido arrancar un resultado positivo en lo que va de competición.
Aún así, el equipo marinense no renuncia a nada. Su buena trayectoria y su cómoda posición en la tabla le anima a confiar en sus opciones, como reconoce un Darío Suárez que se ha convertido en una de las referencias del Peixe Galego en las últimas jornadas. «Está claro que una victoria en esa pista sería muy buena para el equipo a nivel de moral, porque no han perdido en su casa en toda la temporada», asegura el jugador coruñés, elegido para el quinteto de la jornada tras su buena actuación del pasado sábado.
En todo caso, Suárez no oculta que el reto no es sencillo, ya que define al Grupo Eulen como «un equipo difícil, con jugadores jóvenes con mucho que demostrar y que imprimen muchísimo ritmo al partido». Además destaca que cuenta con «una afición muy buena, que aprieta mucho», añadiendo que «si no ha ganado nadie allí es por algo».
Por ello, el base coruñés tiene clara la receta para regresar a Marín con los puntos. «Intentaremos llevar el partido a nuestro terreno e imponer nuestro ritmo, para traernos una victoria y comer el turrón todos muy felices», adelanta.