Jason, el tesoro que todos desean

Iván Antelo A CORUÑA / LA VOZ

DEPORTES

Sevilla, Valencia y Villarreal pelean por la joven perla gallega que deslumbra en Segunda B

15 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Jason la está liando. Ha recuperado su mejor versión y vuelve a ser la sensación del fútbol mediterráneo. A sus 20 años, el coruñés David Remeseiro Salgueiro ha revitalizado su carrera en el Villarreal B, equipo con el que está peleando en el grupo tercero de Segunda B por entrar en los play offs de ascenso a la categoría de plata ?pese a un mal inicio, ya es octavo, a cuatro puntos del cuarto?. El jugador gallego se marchó este verano cedido por el Levante y, a pesar de no ser su misión principal, es el máximo goleador del filial del submarino amarillo con 5 goles ?los mismos que Fran Sol y Nahuel?.

Además, lo ha jugado todo, los veinte partidos, y a un nival tan bueno que son muchos los equipos que ya se han dirigido a su representante para preguntar por su situación contractual con el Levante. «Valencia, Villarreal, Sevilla, Espanyol, Almería... Y algunos de Segunda también, según me dicen», comenta con orgullo Levi, el padre del futbolista. «Tenía que salir, no podía retroceder y jugar en Tercera con el Levante B y por eso me vine aquí. Estoy muy contento por cómo me está saliendo todo. Lo necesitaba», apunta el jugador.

El Villarreal también está muy contento por contar con él. De hecho, ya ha tenido varias reuniones con el Levante para quedarse con el jugador en propiedad. El coruñés tiene contrato con el club levantinista hasta el año 2016, con opción de renovación automática hasta el 2019. Eso sí, hay una cláusula que indica que desde la 15/16 el coruñés debe ser miembro de la primera plantilla granota. De lo contrario, el club deberá dejarle marchar.

Un puñal

El extremo coruñés tiene dos cualidades principalmente: la velocidad y el potente disparo. «Paco López ?técnico del Villarreal B? insistió mucho en ficharle. Dijo que necesitaba una bala, algo diferente para su equipo de jugones», apunta Levi. De ahí que Jason aceptase el reto de embarcarse en el submarino amarillo. De momento, ya ha dejado goles de todos los colores: al Zaragoza B le marcó un penalti que él mismo forzó; al Atlético Baleares le endosó una falta desde 30 metros por la escuadra; con el Eldense se fue en velocidad entre los centrales para finalizar en un magnífico uno para uno; contra el Alcoyano fue oportunista y remató solo en el segundo palo; y ante el Reus marcó desde más de 30 metros un auténtico golazo por la escuadra, a pesar de estar escorado en banda. «No son goles de rutina, eso es verdad», dice sonriente Jason.

El extremo gallego ya sabe lo que es debutar en Primera División. Lo hizo el año pasado con Caparrós, en el Levante. «Se habría quedado en la primera plantilla si no fuera por una pubalgia que le llegó en el peor momento», recuerda el padre. «Pero ahora ya está como un toro, otra vez», añade orgulloso.

¿Y el Dépor? ¿Por qué Jason no está en el equipo de sus amores? «Lo echaron por bajito», desvela Levi, quien todavía se muestra agradecido a Luis Santiago, el seleccionador gallego sub-18. «Lo llevó al Campeonato de España a pesar de ser un año más joven que el resto. Y ahí despuntó».