Rowan Baxter, un «monstruo» con una infancia tormentosa

La Voz

DEPORTES

ALBERT PEREZ | EFE

Familiares del exjugador de rugbi muestran un perfil violento y controlador sobre su exmujer y el infierno que vivió Hannah Clarke antes de morir quemada junto a sus tres hijos

28 feb 2020 . Actualizado a las 13:46 h.

El horror por el asesinato de Hannah Clarke y sus tres hijos a manos de su exmarido, el exjugador de rugbi, Rowan Baxter, dio la vuelta al mundo por la crueldad de sus actos. El exjugador de los New Zeland Warriors de la National Rugby League, plantó fuego al coche en el que viajaba junto a su mujer y sus tres hijos de 6, 4 y 3 años.

Semanas después de la brutal muerte se han conocido más datos a cerca del posesivo y violento carácter de Rowan Baxter. El día en el que ocurrieron los hechos, Hannah salía del colegio con sus tres hijos, cuando Rowan se subió al coche. Lo tenía todo preparado y calculado. A finales del año pasado, la mujer había presentado una demanda de divorcio. Un amigo de Baxter reconoció que «era un hombre peligroso en sentido de posesión y derecho sobre su esposa y sus hijos, sobre todo en estos últimos meses».

Tras el terrible crimen, se han publicado unas imágenes del Baxter «jugando» de una manera un tanto peligrosa con sus tres hijos. El exjugador de rugby coge por el cuello a su hijo pequeño, lo zarandea, lo golpea contra la cama e incluso lo empuja. Unas imágenes que impresionan.

Uno de los familiares de Hannah declaró al canal de televisión ABC que su deseo es que se conozca la historia de la joven «porque hay un millón de personas como ella», además, el padre de la víctima llegó a describir a Rowan como «un ser humano repugnante y un monstruo que debería perderse en el infierno».

Rowan y Hannah estaban inmersos en una dura batalla por la custodia de sus hijos, pero la actitud agresiva del exjugador de rugby llevó a su exmujer a pedir una orden de alejamiento que fue concedida. Según informa The Courier Mail, llegó a ser detenido por la policía después de incumplirla.

Ambos regentaban un gimnasio. Desde su separación, sus padres afirmaron en una entrevista posterior al macabro suceso, que él tenía a Hannah localizada en todo momento y que los últimos años antes de separarse, su vida era un auténtico infierno.

Los padres y el hermano de Hannah concedieron una entrevista exclusiva a News.com semanas después de su muerte. La madre, Suzanne Clarke afirmó que Hannah tenía miedo de que su marido la matara y que le había preguntado a su madre la semana pasada que ¿Qué les pasaría a mis bebés si me mata?. Además, afirmaba que en el trabajo, él no le permitía usar pantalones cortos en el gimnasio y que debía ir tapada en todo momento.

Uno de los mejores amigos de Clarke, Lou Farmer también aseguró que había notado problemas en el matrimonio desde hace años. «Era muy agresivo, sobre todo por la forma en la que le hablaba», declaró a News.com. «Él le obligaba a mantener sexo todas las noches y ella lo consentía porque de lo contrario él no le hablaba durante días» y confirma el control que tenía sobre ella después de separarse: «Él estaba un paso por delante de ella todo el tiempo. Sabía conversaciones de las que ella no le había hablado» y afirma que él tenía algún tipo de dispositivo para espiarla.

Familiares de Rowan Baxter han destapado el carácter violento del deportista. Su prima, Alana Hampson relató a Newshub que con 14 años, escapó de la casa donde vivía con él y los padres de este. Hampson aseguró que la familia, de la que ahora está completamente desvinculada, tiene «secretos oscuros» que convirtieron a Baxter en un mostruo.

Otro de los testimonios escalofriantes ha sido el del hijo de Rowan Baxter de una relación anterior. Iasaiah reconoció que se había separado de su padre durante varios años pero que sí tenía relación con Hannah. «Compartimos un vínculo similar, ya que ambos sufrimos el abuso doméstico y el tormento a manos de Rowan», dijo el joven en sus redes sociales. Y añadió que su infancia junto a su padre «me causó daños irreversibles en mi salud mental. Si pudiera ocupar el lugar de mis tres hermanos, lo haría en un instante», concluyó.

Otra familiar de Baxter, Sandra Taylor, declaró a Nine News que tenía una visión sesgada de las mujeres. «Fue criado junto a un padre que le inculcó que las mujeres deben ser dos cosas: limpiadoras de sus casas y una prostituta». 

En el momento en el que Hannah presentó la demanda de divorcio y dejó el gimnasio en el que trabajaba junto a su exmarido, Sandra Taylor le ofreció trabajo en la tienda que posee en un centro comercial. «En el momento en el que me acerqué a Hannah comenzaron a aparecer cacas de perro en mi jardín, cuando nunca he tenido un perro en casa. Él pasaba continuamente por mi tienda para vigilarla. Fue entonces cuando ella comenzó a preocuparse porque su vida estaba en peligro. Ella tenía miedo».

Hannah consiguió salir del coche incendiado, pero las quemaduras que sufrió eran tan graves que murió en el hospital. Su hermano relató que «las plantas de los pies era la única parte de su cuerpo que no estaba quemada. Queremos utilizar el símbolo de su pie como legado. Queremos intentar ayudar a mujeres que se encuentran en esa misma situación y que han sufrido abuso doméstico, mental, físico y sexual. Queremos llamar al movimiento: Pequeños pasos para Hannah», concluyó.