El gallego participa este fin de semana en el Campeonato de España, en el circuito que lleva su nombre, antes de iniciar su cuarta temporada en la élite
24 feb 2023 . Actualizado a las 21:07 h.En vísperas de iniciar su cuarto curso en el Mundial MXPG, que tendrá su pistoletazo de salida en la Patagonia argentina el 12 de marzo, Jorge Prado García (Lugo, 2001) vuelve a casa para un evento especial. El Campeonato de España de motocrós se correrá por primera vez en Lugo, en el circuito que lleva su nombre.
—¿Qué siente antes de verse como profeta en su tierra?
—Es algo muy especial. Hasta ahora, competir en casa era hacerlo en España. Correr en Lugo a este nivel es nuevo. Es una carrera de pretemporada, y para mí va a ser la primera, así que siempre estás más nervioso. Habrá que soltarse un poco. Luego, todos los pilotos, cuando nos ponemos detrás de la valla, tenemos como objetivo ganar, da igual el tipo de carrera que sea, y esta vez no va a ser distinto.
—Es el culmen para una pretemporada que ya estaba siendo distinta en cuanto a la preparación.
—Este año decidí pasar un poco más de tiempo por Bélgica. Bajé dos semanas a España. Luego fui también a Cerdeña a hacer varios test con el equipo. Intenté variar un poco más de circuitos. Creí que un cambio en los entrenamientos me podía venir bien, después de estar cuatro años rodando casi siempre en el mismo circuito en Italia. Era el momento de empezar a variar cosas para ganar frescura con la moto, probar terrenos diferentes. Estoy contento con la decisión y espero que me ayude a llegar al Mundial al 100 %. Iba a empezar la pretemporada el fin de semana pasado en Arco Di Trento, en Italia, pero me puse malo.
—La salud, jugándosela otra vez.
—Estuve con bastante fiebre y tuve que quedarme en casa, recuperándome. Decidí venir directamente a Lugo para empezar la puesta a punto aquí. Al final, para un atleta es muy complicado ejecutar un plan perfecto de entrenamientos, porque siempre hay imprevistos. Por suerte, esto ha sido una gripe. El motocrós es un deporte peligroso y estas tres temporadas que llevo en la élite estuve muy condicionado por las lesiones. La primera, un fémur y una clavícula. La segunda, el covid. La última, otra vez el covid y el problema en el hombro. Es complicado tener una temporada sin que te pase nada. Ojalá sea esta. Lo más importante para mí es estar entero durante todo el Mundial. Es larguísimo (de marzo a octubre), con un calendario tan exigente, y tantos entrenamientos, que el riesgo que tiene de por sí el deporte aumenta. Si estoy de una pieza, me puedo llevar el título a casa.
—Será su cuarta temporada en la élite, ya puede considerarse un piloto con experiencia.
—Ya sabes lo que te puedes esperar en cada circuito y eso también suma. Si me fijo en los resultados, parece que ha habido una evolución (fue sexto en su primera temporada, quinto en la segunda y tercero en la pasada), pero con lo que me quedo es que he luchado siempre por ganar el Mundial. Esos resultados, que no siempre han sido los deseados, sirven para cubrir un palmarés, pero a nivel emocional siento que estoy mejor preparado que el año pasado, que fue una temporada muy complicada. Tengo muchas ganas de luchar por el título, de que empiece esto y dar caña. Me siento realmente motivado.
—En septiembre decía que con la moto había ido hacia atrás.
—La moto no estaba al nivel. Era nueva de motor, suspensiones, chasis.. Es otro concepto. El año pasado no funcionó. Estuvimos trabajando bastante duro durante la pretemporada para mejorarla con toda la información que les fui dando durante el 2022 para cambiar aquellas cosas que no estaban al nivel, que no eran competitivas.
—¿Y ahora cómo la percibe?
—Me siento un poquito mejor sobre la moto y eso es importante para mí. Lo noto en los entrenamientos, los disfruto más. Es verdad que ha habido una pequeña evolución, pero también que todavía tenemos mucho que mejorar. Podemos dar un paso más hacia adelante para estar cerca de las demás marcas. Cuando empiecen las carreras tendremos más claro lo que sigue faltando. Se va a ver claramente en qué punto andamos, e igual estamos mejor de lo que ahora mismo pienso.
—Tim Gajser tuvo una caída en Italia, pero volverá a ser uno de sus grandes rivales por el título. ¿A quién ve en la pelea para esta temporada que empieza?
—Tengo la sensación de que volveremos a ser los mismos los que estemos arriba. Tim Gajser, cuando se recupere de la lesión, Jeffrey Herlings, Romain Febvre, y posiblemente Jeremy Seewer, que ya ganó varias pruebas a final de la temporada. Creo que el título lo vamos a pelear entre cuatro o cinco pilotos.
—Cada vez está más cerca el gallego Rubén Fernández, séptimo en el último Mundial, que también estará en Lugo este fin de semana.
—Es bonito que Rubén pueda venir. Es gallego, los dos crecimos compitiendo juntos. Este año está también en una escudería con una moto oficial. Es una gran noticia que estemos los dos corriendo en un Mundial. Si yo no me encuentro bien, seguro que Rubén va a estar ahí para apretarme (risas).
Por primera vez, el Nacional de Motocrós se desplaza a Lugo para estrenar el nuevo trazado diseñado por Jorge Prado. La competición, en la categoría élite, arrancó el primer fin de semana de febrero en Montearagón (Toledo) y se prolongará, tras su paso por Lugo, con otras cinco pruebas hasta mediados de mayo.
—No solo vuelve para competir en casa, estrenará su propio circuito. ¿Qué espera de él?
—Los aficionados que veníamos a correr a Lugo siempre soñamos con tener un sitio en el que sentirnos seguros cuando rodamos con la moto. Después de mis dos primeros Mundiales, se puso este proyecto sobre la mesa y, gracias a las instituciones y a mucha gente que se implicó, tenemos hoy este circuito, con todas las prestaciones, a 500 metros solo de dónde empecé yo a rodar en moto. Traer aquí el Campeonato de España es muy importante para nosotros, es un primer paso para ver cómo va funcionando todo.
—¿Podrá algún día este circuito verle competir al más alto nivel en una prueba del Mundial?
—A día de hoy, ya está lo suficientemente avanzado como para acoger una cita del Mundial. Ese será el siguiente paso. Sería algo muy especial para mí, traer el Campeonato del Mundo a la ciudad en la que nací. Absolutamente, sí. Espero competir algún día por el Mundial en Lugo.