El Breogán comienza esta semana de gira fuera de Lugo como discurrió en la anterior. Con actuaciones individuales sublimes, capaces hasta de remontar partidos que parecen imposibles y lagunas impropias de quienes se cuentan entre los jugadores de la segunda mejor liga del mundo que es nuestra competición doméstica.
Sublimes estuvieron una vez más Momirov y Sergi García y frágil como la porcelana la defensa breoganista, cuyo entramado se fue desarmando de forma intermitente pero constante ante el acierto en el triple del equipo israelí, hasta el punto de recibir parciales de hasta 14 puntos sin contestación.
El equipo de Mrsic exhibió momentos esperanzadores junto a despistes frecuentes. Demasiado atenazado se encontró el equipo ante defensas alternativas zonales o de cambios de asignación, pero en cuanto encontró la forma de acelerar el partido, fue apareciendo la esencia de este Breogán, cómodo en transiciones al contragolpe, abriendo el campo con jugadores exteriores en donde la lucha y la brega por cada balón, cada rebote, cada posesión, se hacen indispensables. Y por ello, a pesar del acierto israelí, el rebote ofensivo mantenía al equipo lucense en el partido, aún así los balones perdidos, y el escaso acierto en el tiro condenaban al Breogán a tener que remontar en la segunda parte.
Los azules siempre encajan parciales en contra en la reanudación de las pausas: en la más larga, la del siempre traicionero descanso; y en la más breve de hidratación. Es decir, justo tras los momentos en los que el cuerpo se relaja y la mente se disipa. Un toque de atención para un equipo cuyo fuerte no es la concentración permanente. No obstante, la parroquia breoganista tiene motivos suficientes para el optimismo. Bien es cierto, que el Breogán afinó la puntería antes que el juego. Sin embargo, fueron capaces de acorralar al Hapoel israelí hasta el último minuto de juego, gracias a la gran actuación de sus jugadores exteriores, a los ya mencionados Momirov y Garcia hay que sumar a Jogela con 14 puntos y la reaparición de Polite. Por cierto, dos destacados en esa remontada, Sergi Quintela y Ventura, inédito en la primera parte, sosegado en su juego, ordenado y vibrante, ofreciendo al equipo la consistencia que le faltó tras ser cambiado.
Muchas lagunas, un buen número aciertos y demasiados interrogantes para un equipo que aspira a competir en ambas competiciones en el que se hace necesaria la involucración de más jugadores de la plantilla para un óptimo rendimiento grupal.