Tere Abelleira, la anfitriona de la selección

n. d. amil / A. garrido PONTEVEDRA / CAMBADOS / LA VOZ

DEPORTES

La campeona del mundo jugará por primera vez en el estadio de Pasarón

01 dic 2023 . Actualizado a las 12:13 h.

Están siendo unos días muy especiales para Tere Abelleira. La pontevedresa va a ver cumplido algo que le parecía inalcanzable cuando empezó a jugar al fútbol: disputar un encuentro con la camiseta de la selección española en su Pontevedra natal. «Era algo inimaginable, será inolvidable», apuntó ayer antes del entrenamiento previo al partido que esta noche (21.30 horas, La 1) enfrentará a España contra Italia.

Tere es la anfitriona, ya se dio un baño de masas en verano tras ganar el Mundial, pero hoy viene a disfrutar ante los suyos. Y con los suyos. Si tuviera que darle una entrada a alguien, no sabría a quien escoger, pero sí a quien quiere ver en la grada. No falta su familia, pero tampoco sus entrenadores de base y esas compañeras con las que arrancó hace muchos años compaginando el fútbol sala del Poio Pescamar con el fútbol 11 del AJ Lérez. Hoy llega con España para intentar sellar en Pasarón el pase a la final a cuatro de la Liga de Naciones, donde se decidirá qué dos selecciones europeas acompañarán a Francia en los Juegos de París 2024.

Eso es la teoría y el objetivo conjunto, pero para Abelleira este partido es el de la ilusión de volver a casa, una ilusión parecida a la que van a tener los cientos de niñas que acudirán a ver el encuentro. «Al final, ya empiezan a tener referentes femeninos, referentes que son campeonas y espero que ojalá en unos años sea yo quien vaya a verlas», dijo la futbolista del Real Madrid en la rueda de prensa antes del entrenamiento de Cambados.

La futbolista ve a sus compañeras «muy motivadas» para afrontar un duelo que espera disfrutar. Será la primera vez que Abelleira juegue en Pasarón y reconoce que el momento de saltar al terreno de juego será «muy especial».

Hoy el estadio municipal en el que juega el Pontevedra es Pasarón, pero en sus sueños está que algún día lleve su nombre, como ya lo ha hecho San Lázaro al convertirse en el Vero Boquete. Sería un bautismo de fútbol que todavía le pone colorada, como si le costará asumir que ha tocado el cielo con sus pies. «Me haría mucha ilusión, pero no está en mis manos. Lo que tenga que ser será», concluyó la jugadora del Real Madrid, que es el principal motivo por el que la RFGF peleó para llevar a Pontevedra este partido. Era su manera de hacerle un homenaje público rodeada de quienes la vieron despuntar y la acompañaron en su despegue. Ella le saca poética a lo que ha conseguido y se conforma con que su legado no quede solo en una vitrina e en el nombre de un estadio, sino en la cabeza de las niñas que la aclaman.

Montse Tomé: «Este equipo siempre quiere mejorar, tiene la ambición de ganar»

Mónica Irago

Una pequeña estancia del campo de fútbol de Burgáns, en Cambados, ejerció de improvisada sala de prensa en la previa del partido que enfrentará a España y a Italia en el campo de Pasarón. En una decisión de última hora, la federación decidió que era mejor preservar el césped para el encuentro de este viernes y tanto los entrenamientos de ambas selecciones como las respectivas ruedas de prensa cambiaron de ubicación. La seleccionadora, Montse Tomé, adelantó que todas las jugadoras estarán disponibles para el encuentro. Las dudas estribaban en Irene Paredes y en Mariona Ortiz, pero la primera ya participó en el trabajo con el resto del grupo y la segunda está recuperada de sus problemas físicos. «Tenemos ganas de jugar», apuntó la entrenadora, que reconoció que no sabe qué Italia se puede encontrar mañana. «En el partido que jugamos allá apostraron por un 5-4-1 muy cerrado, pero últimamente han optado por otras alternativas», explicó. 

Montse Tomé aseguró que las futbolistas todavía no sabían quiénes formarán parte del equipo inicial y destacó, por ejemplo, la calidad que tiene España en la portería, con tres gurdametas de gran nivel. «Valoramos todas las posibilidades», contestó cuando fue cuestionada sobre cuál de ellas se colocará mañana bajo palos. También fue contundente la entrenadora a la hora de hablar de su equipo. «Vienen de ser campeonas del mundo y partimos de muy buena base, pero este equipo siempre quiere mejorar, tiene la ambición de ganar», subrayó. La preparadora puso como ejemplo lo sucedido tras el encuentro ante Suiza, en el que España ganó 7-1, y en el que, pese a ese contundente resultado, encontraron detalles a mejorar.

Tuvo también palabras de elogio la seleccionadora para el apoyo que se están encontrando en Galicia. Esta tarde había bastantes seguidores esperando a las puertas del campo de Burgáns para ver de cerca a las campeonas del mundo, pese a que el entrenamiento era a puerta cerrada. «Quiero agradecer tood el cariño que estamos recibiendo. La gente está cada vez más volcada con la selección y ese cariño nos llega y es importante para las jugadoras», concluyó.