Carlsen le ofrece a Nepo compartir el título mundial de ajedrez en partidas relámpago y la federación lo acepta

P. C. Domínguez

DEPORTES

El noruego sorprendió con una propuesta inédita, tras siete partidas disputadas, y el ruso aceptó el guante tendido

01 ene 2025 . Actualizado a las 20:36 h.

«Si hubiéramos continuado, uno de los dos habría ganado por agotamiento. Eso hubiera sido muy cruel. Los dos estábamos muy cansados y nerviosos. Como es normal, habrá gente a favor y en contra». El noruego Magnus Carlsen explicó así ante los medios, expectantes, la insólita decisión de pactar el reparto del título con su rival, el ruso Ian Nepomniachtchi, en la final del Mundial de partidas relámpago que se disputó en Nueva York.

Tras siete partidas disputadas, Carlsen y Nepo, buenos amigos fuera del tablero, detuvieron el juego durante unos minutos, en los que se les vio conversar. El noruego había estado a punto de ganar tras ponerse 2-0 en ventaja en un partido de cuatro juegos. Sin embargo, Nepomniachtchi firmó una épica remontada y se hizo con los dos juegos siguientes. Los desempates posteriores incluyeron tres batallas agónicas, tremendamente disputadas, y en las que ninguno de los dos pudo obtener una ventaja decisiva (3,5-3,5).

Fue en ese momento cuando Carlsen se levantó y le sugirió a su oponente que dividieran la corona y no siguieran jugando. Después de reflexionarlo durante unos minutos, Nepomniachtchi aceptó y los dos se acercaron al árbitro principal y le explicaron su pacto, argumentando que ambos estaban agotados y habían demostrado su igualdad. El acuerdo sorprendió en la sala y tuvo que ser elevado a la Federación Internaciones de Ajedrez que, por medio de su presidente, el ruso Arkady Dvorkovich, aceptó que ambos se proclamasen campeones y compartieran el oro en un desenlace histórico por inédito.

Dvorkovich ya había tenido que intervenir unos días antes para suavizar el código de vestimenta, tras prohibir en un principio y multar al noruego por llevar pantalones vaqueros durante la jornada del pasado viernes. Una indumentaria que Carlsen, que suma su sexto título mundial en partidas relámpago, repitió ayer después de que, curiosamente, una firma de origen neerlandés le firmara un contrato para anunciar ropa vaquera.