Reto complicado el que se presenta en esta jornada para el Leyma Coruña, pues haberle ganado en la primera vuelta de esa manera seguro que esta en la retina de muchos jugadores blancos y buscaran venganza en una cancha que, hasta el momento se ha mostrado inexpugnable en esta campaña.
Enfrente, el Básquet Coruña tendrá a un Real Madrid que esta yendo a más colectivamente, pues sabe que a la vuelta de la esquina está el segundo trofeo en juego de la temporada.
A la de Lima, se le suma la baja de Heurtel, al que le pesa la inactividad y arrastra molestias en su rodilla desde el partido contra el Murcia, lo que ha condicionado de nuevo la semana de entrenamientos para preparar de la mejor manera posible el encuentro contra los madrileños.
Otros de los temas pendientes de la primera vuelta es la de puntos recibidos, las perdidas no forzadas y sobre todo la toma de decisiones en los momentos claves. Encontrarnos en undécima posición en cuanto a la valoración general nos da pistas de que se hacen muchas cosas bien en muchas fases del encuentro, pero son insuficientes, debido a instantes puntuales, por dos o tres malas decisiones en el momento H decantan el encuentro hacia el otro lado.
Parece claro que el objetivo principal ahora mismo es romper la racha de seis derrotas seguidas y, no siendo la mejor pista para ello, sí es momento de construir, hacerse fuertes en básicos que nos valdrán para el futuro. Epifanio reclama para poder estar en marcador dentro del partido, que ellos consigan canasta por su talento, que nos tengan que ganar, que no sea por el mal hacer el equipo naranja. Y jugar sin presión para conseguir porcentajes buenos de tiro en momentos importantes, así como evitar las pérdidas que favorezcan su juego rápido.
Uno de los brotes verdes de esta primera vuelta en el apartado estadístico, es ser el tercer equipo en cuanto al porcentaje de rebote. Era impensable a principio de año y por ahí se puede abrir una vía para competirle a este todopoderoso equipo merengue.
La muy buena respuesta de la afición que acompañará al equipo en su viaje, como había ocurrido en la final de la Copa Princesa, al Movistar Arena. Esperemos, como el año pasado, aunque no se consiga la victoria, el paso por Madrid sea el revulsivo para hacer una magnifica segunda vuelta que nos lleve a conseguir los objetivos.