Jonas Vingegaard: «Soy feliz con la persona que soy»

DEPORTES

Manon Cruz

Trabajó en la descarga de pescado, su suegra es una estrella televisiva en Dinamarca y defendió a los manifestantes propalestinos que interrumpieron la ronda española

14 sep 2025 . Actualizado a las 13:44 h.

La Vuelta se adentró en Galicia con el eco de su controvertido paso por Bilbao, donde las protestas contra la presencia del Israel-Premier Tech habían obligado a suspender el final de etapa. En O Corgo, el ciclista de Movistar Javier Romo se cayó tras girarse cuando un efectivo de seguridad saltó a la calzada para intentar bloquear a un manifestante propalestino que había resbalado en la cuneta. La tensión entre el pelotón seguía en aumento y la cadena danesa TV2 buscó la reacción del líder Jonas Vingegaard (Hillerslev, 1996). «La gente lo hace por una razón. Es terrible lo que está pasando. Creo que quizá los que protestan quieren tener una voz y los medios deban dársela. Quizá mismo por eso lo están haciendo», dijo.

Con el portugués Almeida a rebufo, Vingegaard todavía no le había dado entonces carpetazo a la carrera. Sus palabras resonaron en todo el mundo por su talla como ganador del Tour de Francia en el 2022 y el 2023. No fue un desliz. Ayer, tras encarrilar su primera Vuelta, Vingegaard insistió: «Es verdad que ha habido muchas quejas contra Israel. Todo el mundo tiene derecho a protestar. Es una pena que pase aquí, pero entiendo el motivo por el que lo hacen». Según Eurosport, el Visma, su equipo, fue uno de los que más presión ha ejercido en el pelotón para expulsar de la carrera al equipo israelí.

Un flaco en un país llano

Vingegaard ha ganado La Vuelta en el Puerto de Navacerrada, bautizado como la Bola del Mundo, a 2.251 metros de altitud. Y eso que viene de un país que tiene su mayor punto a solo 173. Jonas no destacó al principio de su carrera debido a que las carreteras llanas y con mucho viento de su país no eran idóneas para sus 58 kilos. «Descubrí mi primera subida cuando tenía 16 años en Italia. Después me di cuenta de que no se me dio mal». Sus cualidades emergieron cuando empezó a competir en otros países europeos.

Al ciclismo llegó por casualidad. Quiso probarlo después de ver al pelotón del Tour de Dinamarca pasar por la puerta de su casa. Desde los diez años jugaba al fútbol —es un gran fan del Liverpool— y al balonmano. Sobre una bicicleta no tardó en despuntar. En la primera prueba infantil que organizó el club en el que se apuntó de Hillerslev, el pueblo al norte de Dinamarca en el que nació, Jonas sobresalió y se subió al podio. También había probado la natación y el bádminton.

«Mi ídolo era Ricco, pero se dopó»

La leyenda del ciclismo danés Bjarne Riis nació en Herning, a apenas unos 100 kilómetros de Hillerslev, pero el último compatriota en ganar el Tour de Francia antes que él (en 1996, el año en el que Vingegaard nació) nunca llegó a ser su referencia. «Empecé a seguir el ciclismo cuando él ya se había retirado. Mi primer ídolo fue Riccardo Ricco, pero mi admiración se esfumó cuando estuvo envuelto en un caso de dopaje», contó a Velo Magazine.

Casado con Trine Hansen, con la que tiene una hija de cinco años a la que llamaron Frida, y con la que volvió a ser padre de un niño en septiembre del 2024, la suegra de Vingegaard, Rosa Kildhal, es una celebridad en Dinamarca. Logró mucha popularidad cuando participó en el programa televisivo de cocina Great Danish Bake Off. Kildhal se abrió su propio canal de Youtube y en el 2018 tomó parte en el Dancing with the stars de su país. El ciclista a veces cocina con ella y es un fan de su puré de patatas y de sus platos con salmón.

Vingegaard forjó su carácter trabajando en una fábrica de pescado en el puerto de Hanstholm. «No necesitaba trabajar, pero todavía no sabía si podía llegar a ser un ciclista profesional. Solo salía con la bici un par de días cada semana y así estaba ocupado sin aburrirme. Me gustaba hacerlo, a pesar de que tenía que levantarme a las 5 de la mañana. Era una forma de tener la cabeza ocupada. Me mandaban poner en orden los pescados, llevar las facturas...», contó en una entrevista en la Gazzetta dello Sport.

Lo ficharon en España

Sus cualidades como escalador llamaron la atención del Jumbo-Visma después de que lograra un tiempo récord en Coll de Rates durante una concentración en España con su anterior equipo, el ColoQuick. Así empezó Vingegaard su despegue. En Madrid sumará su última gloria. «La Vuelta es una de las grandes carreras, algo con lo que siempre he soñado. Soy feliz con la persona que soy».