Vinicius, otra vez ángel y demonio ante el Levante

Ignacio Tylko COLPISA

DEPORTES

DPA vía Europa Press | EUROPAPRESS

El brasileño marcó, asistió y completó su primer partido con Xabi Alonso, pero le faltó al respeto a Elgezabal en la única nota discordante de un Real Madrid redondo

24 sep 2025 . Actualizado a las 16:30 h.

«Estamos en fase de construcción. Llevamos 51 días y hay mucho camino que recorrer y cosas que mejorar», expresó Xabi Alonso tras la exhibición del Real Madrid en el Ciutat de València, donde quizá realizó su partido más completo en este inicio de curso. No abandonó el tono mesurado y reflexivo que le caracteriza y huyó de cualquier euforia con la mirada en el derbi del sábado en el Metropolitano.

Es cierto que el líder encontró antes los resultados que el juego, pero a base de triunfos todo es más fácil y el mensaje del entrenador cala mejor. Sin contar la victoria de Champions ante el Marsella, seis triunfos en el torneo de la regularidad, 14 goles a favor, solo tres en contra y apenas intervenciones de Courtois. Kylian Mbappé, autor ya de nueve goles este curso, es un volcán que recuerda al del PSG, el equipo se activa en la presión alta como no hacía ni con Ancelotti ni antes con Zidane, toda la plantilla está involucrada, la gestión de minutos es excelente y Álvaro Carreras, Dean Huijsen y Franco Mastantuono, tres recién llegados, son tres fichajes enormes, con rendimientos por encima incluso de lo esperado.

Otra excelente noticia para el Madrid ante el Levante fue la actitud y el partido de Vinicius, hasta ahora el único grano molesto para Xabi Alonso, al menos de puertas hacia fuera. El brasileño se enfadó tras ser sustituido por cuarta vez en esta Liga contra el Espanyol, pero ante el equipo de Julián Calero marcó un golazo con el exterior que sorprendió a todos y abrió el camino de la goleada, y asistió a Mastantuono en la jugada del segundo tanto. Además, completó por primera vez en esta Liga un partido sin ser relevado.

«Vini ha sido un jugador decisivo e importante», celebró el técnico guipuzcoano al ser preguntado por el astro brasileño y sin querer confirmar si será titular el sábado ante el Atlético, a priori el primer examen verdaderamente exigente del Real Madrid tras haber superado los test ante Osasuna, Oviedo, Mallorca, Real Sociedad, Espanyol y Levante. Más allá de individualizar, Xabi destacó la «flexibilidad», «versatilidad» y capacidad de adaptación que mostraron en conjunto sus pupilos.

Vinicius ha sido titular en cinco de esos seis encuentros, ya que solo se quedó de inicio en el banquillo del Carlos Tartiere. Ese día solo actuó 27 minutos, los mismos que en el choque europeo frente al Marsella, donde tampoco empezó entre los once elegidos. El Levante se le da de maravilla, ya que ante los granotas firmó el primer hat trick de su carrera, el 13 de mayo de 2022 en el 6-0 del Santiago Bernabéu, y en la primera vuelta salió desde el banquillo para sellar un doblete en un duelo vibrante que acabó 3-3 en el Ciutat de València.

Hasta la fecha no es indiscutible para Xabi Alonso, a quien es evidente que Vini no le ha entrado por el ojo igual que a Carletto. Con 412 minutos en esos seis encuentros, es el séptimo futbolista más utilizado de la plantilla, superado por Courtois (540), el único que lo ha jugado todo, Carreras (532), Mbappé (528), Fede Valverde (476), Tchouaméni (469) y Arda Güler (443). Sus números son aceptables, con tres goles y tres asistencias, pero frente el Levante es el pleito en el que se le vio más enchufado, menos distraído.

Elgezabal dice «basta» 

Siempre protegido por el presidente Florentino Pérez, hasta el punto de dar plantón como club a France Football cuando el año pasado se conoció a última hora que el Balón de Oro lo ganaba Rodri Hernández, el problema se presenta para el club y el entrenador cuando las faltas de respeto de Vinicius no son con los jugadores o aficiones rivales sino con los propios compañeros. Y eso es lo que sucede cuando un futbolista, por mucha estrella que sea, se queja de ser cambiado sin reparar en que cuando uno sale, otro entra.

Como la cabra tira al monte, tras el pleito ante el Levante se supo que otra vez faltó a un adversario. Fue cuando Mbappé iba a lanzar el penalti del 1-3 y Vinicius se acercó a Elgezabal y le tocó la cara. El defensa vizcaíno fue quien cometió esa pena máxima y también el jugador que le hizo una entrada fuerte antes, pero Vinicius volvió a equivocarse con esa conducta reprobable y antideportiva. «No quiero poner más leña al fuego. Es verdad que cuando se nos falta al respeto, no solo a nosotros si no también a la afición, hay que decir basta. Es un jugador con muchísimo potencial, pero hay diferentes situaciones que nos las paso como persona. Para mí estaba fuera de lugar y no quiero darle más bombo porque no es necesario». Otro colega de profesión más que se ha sentido despreciado por Vini, ángel y demonio.