Marc Márquez reconquista el trono de motoGP en Japón

Jesús Gutiérrez

DEPORTES

Kim Kyung-Hoon | REUTERS

Suma nueve títulos mundiales e iguala a Rossi, Ubbiali y Hailwood

28 sep 2025 . Actualizado a las 13:18 h.

Este 28 de septiembre ya forma parte de la historia del motociclismo en particular y del deporte en general. El día en que Marc Márquez volvió a ganar el título más importante sobre dos ruedas. Tras cinco años de sequía, por culpa de un carrusel de lesiones que estuvo a punto de retirarle, el de Cervera sumó su noveno cetro mundial y el séptimo de la clase reina. El más importante de todos y que celebró con un lema en su camiseta: «Más que un número». Porque este éxito no es uno más, es el regreso más grande jamás contado en la historia del deporte. 2.184 días después, Marc Márquez se proclamó campeón del mundo de MotoGP y de alguna forma, cerraba un círculo en su carrera deportiva y en su vida personal.

«Estoy en paz conmigo mismo», decía el piloto español entre lágrimas una vez se había bajado ya toda la adrenalina de la celebración. «Entré en un bucle en el que mucha gente me ha ayudado a salir, pero al final era un Marc contra Marc. Pero ahora no quiero recordar lo que ha pasado, solo quiero disfrutar del momento porque el ser humano tiene la capacidad de olvidarse de lo malo y acordarse de lo bueno. Este Mundial ha sido el mayor reto de mi vida. Estar en la gloria, tocar fondo y volver a subir». Unos minutos antes, a las 14:44 en el circuito de Motegi (las 7:44 de la mañana en horario peninsular español), Marc Márquez completaba la última de las 24 vueltas de este GP de Japón para la historia. La segunda posición en carrera por detrás de su compañero Pecco Bagnaia le aseguraba matemáticamente el título con cinco carreras de margen.

Lo celebraba en la pista, con la felicitación de todos los pilotos y con un emotivo vídeo que le hizo derramar las primeras lágrimas del día. Después paseó la bandera española hasta la recta de meta, donde se hizo el acto protocolario de poner la placa con su nombre en la renovada Torre de los Campeones, el icónico trofeo de MotoGP. La mejor versión de Bagnaia En paralelo al título de Marc, la carrera de MotoGP no tuvo apenas historia, pero sí mucha tensión final por culpa de la mecánica. Y es que Bagnaia lideró desde la salida, se aprovechó de que en la arrancada Pedro Acosta se intercaló entre las dos motos rojas para escaparse y abrió hueco desde las primeras vueltas.

Lo que parecía un paseo triunfal, estuvo a punto de tornarse en drama, ya que a falta de diez vueltas empezó a salir humo blanco de la Ducati de Bagnaia. Una fumata que se iba incrementando con el paso de las vueltas y que hacía prever la rotura del motor que habría retirado al italiano. «No sé lo que ha pasado. No me he dado cuenta de nada. Solo he notado que faltaba un poco de potencia en las tres o cuatro últimas vueltas».

El director de carrera de MotoGP llegó a bajar al box de Ducati a pedir explicaciones y se llegó a temer una descalificación por temas de seguridad, pero finalmente ni llegó la sanción ni el motor dijo basta. Bagnaia firmó un fin de semana impecable, con la pole y las victorias al sprint y en carrera. Y tras la celebración, tenía sentimientos encontrados: «Por un lado estoy alegre, pero por otro enfadado porque no haya llegado antes», dijo en referencia a esos cambios en su Ducati, con los que ha recuperado su mejor versión. Durante buena parte de la prueba, el último escalón del podio lo tenía Acosta, pero el murciano gastó mucho neumático en la parte inicial de la carrera y se quedó sin gomas al final, con lo que fue perdiendo posiciones, hasta que se salió de pista a falta de cinco vueltas y perdió su lugar en los puntos.

Esa tercera posición la acabó conquistando Joan Mir, en otro de los retornos del día ya que no subía a un podio desde 2021 y lograba también su mejor resultado desde que corre con Honda. Y precisamente en el circuito que es propiedad de la marca nipona. Cuarto terminó Marco Bezzecchi con la Aprilia y quinto Franco Morbidelli. En su fin de semana más difícil del año, Álex Márquez acabó sexto logrando un buen botín de puntos, pensando sobre todo en esa lucha por el subcampeonato con Bagnaia, que con el doblete de Japón se reengancha a esta lucha. Mantiene 66 puntos de renta sobre el italiano y ya se podrá centrar en esa única batalla, una vez que su hermano cerró el título de MotoGP.