Lucía Pardo: «Con mucho trabajo, porque aquí nadie regala nada, puedes alcanzarlo todo»

Daniel Llácer / P. A. LA VOZ

DEPORTES

abraldes

La joven delantera gallega defiende actualmente los colores de la Real Sociedad tras su paso por Friol y Madrid CFF entre otros

06 oct 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Lucía Pardo Méndez (Outeiro de Rei, 2000), comenzó a jugar al fútbol en compañía de su familia, pasó por los pabellones de su pueblo hasta dar el salto al fútbol sobre el verde, y convertirse en la jugadora que es a día de hoy.

—¿Cómo fue su primer contacto con el fútbol?

—Pues yo empecé a jugar al fútbol en el jardín de mi casa con mi padre y con mi hermano. A mi hermano le gustaba también mucho el fútbol y mi padre, como había sido portero, pues el fútbol siempre estaba en casa.

—¿Y a nivel de clubes?

—Al principio empecé en las categorías inferiores del Outeiro de Rei al fútbol sala con mis compañeros de clase, luego ya fiché por el Azkar. Más tarde me fui a la Milagrosa, ya del fútbol campo, y esa fue mi primera experiencia con chicas, ahíy , después ya vinieron Friol, Madrid y luego Real Sociedad.

—¿Qué le hizo decidirse por el fútbol y no por el fútbol sala?

—Sentía que se me quedaba ya pequeño el campo. Al final a mí en el fútbol me gusta correr, ir mucho al espacio, era rápida, y siempre me ha gustado más ver fútbol en campo que fútbol sala.

—¿Alguna vez tuvo algún problema jugando con chicos?

—No, la verdad es que no. En mi cole, o en todas las experiencias que he tenido de pequeña, tampoco era la única niña, siempre hemos sido bien acogidas y nos trataban como a una más.

—¿Cómo fue su marcha a Madrid para jugar al fútbol?

—Bueno, al final yo siempre he sido una persona bastante independiente. Entonces, claro que se te hace difícil. Al estar acostumbrada al estar todos los días con tu familia, llegas a casa o tienes un mal día, y ahí están. Pero al final no lo llevé del todo mal, también he tenido suerte porque tengo familia en Madrid y eso siempre me ayudó porque era un poco como mi rutina; y todos los fines de semana los iba a ver.

—Por aquel entonces recibía la llamada de las inferiores de la selección, ¿cómo lo recuerda?

—Al final siempre es emocionante que te llame la selección española. La primera vez que me llamaron aun estaba en Friol, y ahí sí que me llamó mucho la atención, porque jugamos un amistoso contra la absoluta con Aitana, Alexia y toda esta gente; y, claro, yo venía de segunda y mis compañeras, del Barça o el Atleti. Compartir momentos en las salas con Jenni o Alexia claro que te llama y te impacta. Al final ir con la selección siempre te pone un poco más en el foco, ves más la profesionalidad, la gente, la calidad que hay en España... Es una gran experiencia, la verdad.

—¿De pequeña tenía algún referente en el fútbol?

—A nivel de fútbol femenino, es verdad que, al ser gallega, lo más cercano era Vero Boquete, es una persona en la que sí que me he fijado mucho, en ella y en Marta, sobre todo. Luego ya más adelante Alexia, Jenni... Siempre son referentes.

—¿Cree que ahora los niños y niñas tienen más referentes en el fútbol femenino?

—Sí, por supuesto. Cada vez el fútbol femenino tiene más importancia en nuestra sociedad, cada vez mas niñas y también los niños, que es muy importante, tienen como referentes a jugadoras como Alexia, Jenni, Mariona... También la visibilidad es importante, poder tener acceso a ver todos los fines de semana nuestros partidos, es algo que nosotras no teníamos, eso puede hacer crecer mucho al deporte.

—¿Como está ahora viviendo esta experiencia en la Real Sociedad?

—Al final yo buscaba dar un pasito más, y lo he dado. Las condiciones, las instalaciones que tenemos aquí, con nuevo estadio, y tenemos un edificio solo para el fútbol femenino... Es otro nivel. Es un espectáculo, ojalá dentro de poco todas las jugadoras y niñas puedan tener acceso a todo este tipo de instalaciones; que sea lo normal y no la excepción.

—¿Echa de menos Galicia?

—Por supuesto, a mi familia y a mi perro, sobre todo, porque soy una persona muy familiar. Obviamente también la comida gallega, todo un poco de Galicia se echa de menos siempre.

—Si pudiera llevarse a San Sebastián algo de Galicia, ¿qué sería?

— A mi perro y a mi familia, sí, por supuesto. Ojalá estuviesen aquí.

—¿Hay algún sueño que le quede por cumplir?

— Pues a nivel personal es jugar una Champions o un Mundial. Ojalá con la Real podamos hacer un gran año y, puestos a soñar, por qué no estar ahí y meternos en Champions.

—¿Qué le diría a todas las niñas que quieren comenzar a jugar al fútbol?

—Pues que sean valientes, que se atrevan, que no tengan miedo y, con mucho trabajo, porque aquí nadie regala nada, que podrán alcanzarlo todo.

En corto

Mientras disputa la temporada con la Real Sociedad, Lucía repasa cuáles son sus pasiones fuera del campo de fútbol.

—¿Tiene alguna manía antes de los partidos?

—La verdad es que no, no tengo muchas manías, solo que entro con el pie izquierdo y ya está.

—¿Cuál es su estadio favorito?

—El Camp Nou.

—¿Cómo sería su día libre ideal?

—Si tuviese la posibilidad, pues estar tranquila con mi familia en casa, con mi perro, una comida familiar, ir a pasear, ir al río con ellos o a la playa, y algo así, un día tranquilo en familia.

—¿Qué música suele escuchar antes de los partidos?

—Antes de los partidos, la verdad, es que yo escucho de todo: pero, sobre todo, más música así que me active un poco, del estilo de reguetón, más tecno o algo así siempre.

—¿Cuál es su comida favorita?

—Me encanta la paella, y el pulpo á feira, por supuesto

—¿Es más de series o de películas?

—Más de series.

—¿Alguna recomendación?

—Pues ahora me he visto la de Dos Tumbas y me ha gustado bastante.

—¿Y leer le gusta?

—Sí, me encanta.

—¿Hay alguna lectura que le haya gustado especialmente?

—Me gustó mucho la saga de Carmen Mola, la de La Novia Gitana.

—Si no fuera futbolista, ¿qué le gustaría ser?

—Pues, como estoy estudiando nutrición, me gustaría trabajar de eso, me gustaría hacerlo en laboratorio para descubrir cosas, tratamientos contra el cáncer, por ejemplo.