Le anularon un penalti en el minuto 93, a pesar del derribo claro a Rayane
12 oct 2025 . Actualizado a las 00:17 h.Tres goles de Nèiser Villarreal, el último de ellos en el minuto 89, y una polémica decisión arbitral, al anular un claro penalti para España en el 93, dejaron a la selección sub-20 sin las semifinales del Mundial. Cayó ante una Colombia que impuso su poderío físico y que abusó de la debilidad defensiva de su rival. Como estaba siendo habitual, David Mella comenzó el partido desde el banquillo y entró en la segunda mitad. El gallego volvió a ser el primer cambio, esta vez en el minuto 75, y reactivó a la selección en el tramo final.
Los de Paco Gallardo acumularon un gran número de llegadas en la primera mitad, aprovechándose de la movilidad de sus cuatro hombres de ataque (García, Rayene, Virgili y Bravo). Pero también los cafeteros amenazaron la portería de Fran González en rápidos contragolpes. Serían los sudamericanos los que acabarían encontrando el gol cerca del descanso en una veloz combinación por su costado izquierdo.
La respuesta española no llegó hasta la segunda mitad. Pablo García y Fortea conectaron en la banda derecha y el centro del lateral fue aprovechado por Rayane para poner las tablas (57). Solo tres minutos después, un gran pared por el otro costado, por el izquierdo, permitió a Virgili hacer el 2-1 (60). Una alegría que duró poco a los de Paco Gallardo, pues Villarreal volvió a coger desprevenida a la defensa y marcó su segundo tanto en el partido (64).
Pablo García y Rayane tuvieron dos buenas ocasiones para España y así clasificarla para semifinales. También Fran González evitó el gol de Colombia a la salida de un córner (86). Sin embargo, cuando la prórroga parecía inevitable, Villarreal volvió a cazar una contra e hizo el definitivo 2-3 que clasificó a Colombia.
Ya en el 93, el árbitro señaló penalti en una caída de Rayane dentro del área. Pero inexplicablemente, tras revisarlo en el monitor, señaló falta fuera del área. El libre directo acabó en córner, pero el trencillo no lo dejó sacar, aumentando el enfado español, que no entendió las decisiones tomadas en el epílogo.