Transporte de mercancías y usuarios por motivos laborales, principales beneficiarios
19 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El anuncio de bonificaciones para los usuarios de la AP-53 entre Santiago y Dozón, a implementar durante el primer trimestre del próximo año, supone la materialización del pacto de gobierno PSOE-BNG de noviembre del 2023 para la investidura de Pedro Sánchez como presidente. Y avanzan que serán las mismas de las que goza la AP-9. Una medida ansiada desde hace años ante el agravio comparativo, en espera de que se logre la gratuidad total para equipararla la tramo desde Dozón a Ourense, la AG-53, que desde su apertura no ha costado ni un euro a los conductores.
Esa rebaja de tarifas lleva aparejada varias consecuencias. La primera, el ahorro económico para usuarios de la AP-53 en determinadas condiciones. En especial aquellos que la utilizan, o podrían emplear si el precio actual no fuese tan abusivo, de forma habitual. En ese grupo estaría el transporte de mercancías o viajeros, pero sobre todo aquellas personas que se desplazan a diario por motivos laborales entre localidades por donde discurre esta autopista.
Cuantificar cuántas personas se pueden beneficiar de esas bonificaciones resulta tarea imposible. Pero puede ser una cifra sustancial si tenemos en cuenta la intensidad media diaria de tráfico por esta autopista. A año cerrado, en el 2023 eran 7.093 los vehículos que circulaban de media cada jornada. De ellos muchos sin duda realizan trayectos constantes a pesar de los 6,70 euros del viaje entre Santiago y Lalín o los 4,05 desde la capital compostelana a Silleda, las dos opciones más utilizadas por los conductores que optan por la AP-53.
Pero otro beneficio, ya no económico sino de seguridad y reducción de tiempo de trayecto, radica en la posibilidad de que esa rebaja reduzca el tráfico por la deteriorada N-525. Una carretera que requiere mejoras en varios tramos y que está saturada precisamente por el alto coste de la autopista.
Alegría de Crespo por la decisión tras su pregunta en el Senado
El alcalde de Lalín y senador del PP, José Crespo, mostraba ayer su alegría por el efecto conseguido con su pregunta registrada el pasado 12 de diciembre en la Cámara Alta sobre el compromiso de bonificar los peajes de la AP-53. Cree que sirvió para que el ministro de Transportes, Óscar Puente, activase ese acuerdo de gobierno suscrito entre PSOE y BNG en el 2023. Ahora aguarda que cumpla ese anuncio de abaratar las tarifas en el primer trimestre del 2025. «Estaremos vixiantes de que as bonificacións sexan as comprometidas e nunca menores que as da AP-9», dijo.
Crespo le había recordado a Puente en el Senado el martes que el PSOE se había comprometido en la campaña autonómica a la gratuidad de la AP-53, sin que se adoptase ni tan siquiera la rebaja de peaje más de un año después del acuerdo PSOE-BNG.
Valoración de Paula Fernández
Por su parte, la diputada nacional del PSOE y alcaldesa de Silleda, Paula Fernández, ponía en valor la decisión de implementar la rebaja de la AP-53,
«medida esperada e coñecida». «Abrir a posibilidade a estas bonificacións sen estar suxeitas á aprobación dos orzamentos é unha boa nova, xa que permiten avanzar sen depender de bloqueos ou tensións políticas que tantas veces frearon medidas necesarias para o benestar da cidadanía»
, dijo.
Resalta los avances para Deza de los gobiernos socialistas ante problemas que el PP era incapaz de solventar durante años. Y les pedía una pancarta dando las gracias por el logro de la rebaja.