«Brillante» y «Más», dos bueyes magníficos de Pepe do Chacino que rondan los 2.000 kilos, esperan comprador

María Cuadrado Fernández
m. cuadrado XOVE / LA VOZ

SILLEDA

El xovense los crio con esmero durante ocho años siguiendo la tradición familiar

05 sep 2023 . Actualizado a las 19:15 h.

Brillante y Más son dos bueyes criados durante los últimos 7 y 8 años en la casa de «Pepe do Chacino». Así se le conoce coloquialmente a José Louzao Quelle, vecino de Xove de 75 años, que conserva la tradición familiar de criar y comercializar ganado. El criador calcula que el peso de cada animal ronda los 2.000 kilos en vivo y de ellos, solo tiene buenas palabras. Además de destacar que son magníficas reses, Pepe alaba su carácter: «Por religiosos e mansos podíanse vender ben».

Tras años de crianza y de dedicación —«Que cousa hai que non dea traballo!», apunta el septuagenario— ahora los tiene a la venta. Espera a un comprador que sepa valorar la calidad del producto, fruto de una cuidada crianza en la que se ha mimado la alimentación y se ha apostado por el bienestar de los animales.

PEPA LOSADA

Por ahora no se ha pasado comprador interesado por su finca, ubicada en Xove. El plan B será llevarlos a Silleda: «A vender nunca lle teño medo, son animais moi bos. O que haberá é que defendelos!».

«Pepe do Chacino» sabe de lo que habla. Brillante, un ejemplar gallego tradicional de tiro, mide 3,15 metros de largo y 2,05 de alto, mientras que Más, un gallego de cruce y raza mixta, alcanza 3,10 de largo y 1,95 de alto. Más recibió ese nombre por superar en dimensiones a otro criado en la finca y Brillante, por su piel.

Tradición familiar

La tradición en la cría de ganado le viene de lejos. Pepe y su familia tuvieron dos carnicerías y supermercados en Xove y Celeiro, pero ya su padre, conocido profesionalmente como «O Lugués» fue muchos años comprador de ganado en exclusiva para la casa Fernández, en Lugo, «toda unha institución», rememora el criador xovense, que asegura que era una empresa que enviaba reses para el País Vasco y otras regiones. De aquella etapa, él mismo guarda varias anécdotas, algunas en tierras vascas: «Con 17 anos cheguei a un restaurante con moita fama no que a especialidade da casa era a carne de gando da Mariña lucense. Presumían de servir carne galega». Recuerda que durante décadas la costumbre era enviar desde la comarca bueyes entre marzo y julio: «Mandaban catro camións de bois ao País Vasco e cada camión levaba dúas ou tres parexas». También rememora cuando antiguamente en cada casa había un par de bueyes y en invierno se engordaban para que en primavera estuvieran robustos y con más opciones de salida comercial.

PEPA LOSADA

Gran defensor del campo, ensalza la calidad de los bueyes que se crían en el norte de la provincia lucense, principalmente por la alimentación que reciben: «Comen moito verde, reciben bos manexos e consíguese que teñan unha carne especial, rosada, moi valorada».

PEPA LOSADA

«Pepe do Chacino», quien años antes vendió algunos ejemplares también a la cooperativa Artesáns Gandeiros, no oculta su pasión por criar bueyes. «Gústanme os animais porque foi o único que vivín», confiesa este xovense polifacético que en sus años mozos afirma que fue camarero en Ciudad del Cabo, «mandei un barco» y también fue criador y carnicero. Además de atender a Brillante y a Más, Pepe se ocupa de otro buey castrado y de otro ejemplar «que deixaremos para sementar porque ten unha xenética moi boa».