Manuel Rodríguez vincula cualquier operación al mantenimiento de los empleos actuales El megacontrato para Venezuela y los buques de acero garantizan trabajo hasta el año 2010.
12 jul 2006 . Actualizado a las 07:00 h.El presidente del grupo Rodman, Manuel Rodríguez, lanzó ayer un mensaje tranquilizador a la plantilla sobre posibles operaciones de venta del astillero a socios externos -en referencia a las negociaciones que ha mantenido con el financiero Juan Abelló y el empresario Jesús de Polanco-, y dejó claro que cualquier iniciativa tendrá que contar necesariamente con el mantenimiento de los puestos de trabajo actuales y con la realización de los proyectos de expansión y consolidación de sus productos. Rodríguez posee el 75% del grupo de construcción naval, mientras que el fondo de capital riesgo británico 3i Europe dispone del 24% de la compañía desde el mes de julio del 2004. Rodríguez reconoció ante sus empleados que desde hace tiempo ha estado escuchando distintas ofertas de compra o de participación en la empresa, pero que a día de hoy no ha tomado ninguna decisión a pesar del numeroso cortejo de novias que tiene en este momento. El dueño de Rodman, propietario del astillero desde el año 1974, no concretó si esas ofertas se refieren a una adquisición mayoritaria por parte de alguna firma o socio particular -lo que supondría su salida después de 32 años, algo que ni él mismo descartó-, o simplemente a la venta de un paquete accionarial minoritario, con lo que seguiría manteniendo el control de la compañía naval. El empresario insistió en que «hay ofertas», porque el astillero está en una buena forma financiera y comercial, y seguirá ganando valor en los próximos años por los planes de expansión internacional (abrirá de forma inminente una planta en Portugal), la división de buques de acero, los nuevos negocios derivados de diseños de barcos de poliéster con esloras de entre 16 y 30 metros y, sobre todo, un megacontrato con Venezuela, que ayer confirmó a la plantilla. Según dijo, este compromiso supondrá una carga de trabajo para cuatro o cinco años más, con la fabricación de patrulleras, buques de pesca y catamaranes.