El operador de telecomunicaciones por cable ONO cerró el primer semestre con un beneficio neto de 28 millones de euros, un 8,5% más que en el mismo período del año anterior. En estos seis primeros meses, los ingresos cayeron un 3,6% con 741 millones de euros, mientras que su resultado operativo bruto (Ebitda) fue de 352 millones, un 2,9% menos que hace un año. ONO informó de que los ingresos procedentes del segmento residencial se mantuvieron con 587 millones de euros, y cayeron los procedentes de grandes cuentas y servicios mayoristas, por la disminución en el consumo telefónico de llamadas fijo-móvil y a la bajada de precios. Los ingresos procedentes de las pymes mantuvieron su tendencia creciente. En el primer semestre del año, ONO invirtió 117 millones de euros, un 15% más que en el mismo período del año pasado, como consecuencia del aumento de clientes y de las inversiones requeridas para el despliegue de su nueva tecnología Docsis 3.0 que permitirá a sus usuarios acceder a los 50 megabits por segundo a partir del próximo mes de septiembre.