Ruiz-Mateos abandona Nueva Rumasa en plena crisis de solvencia

J. D. a. madrid / colpisAmadrid / efe

ECONOMÍA

22 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

José María Ruiz-Mateos se retira de la primera línea empresarial. El fundador del grupo Rumasa da un paso atrás para dejar la gestión del holding en manos de sus seis hijos varones.

El octogenario patriarca del clan Ruiz-Mateos ha explicado que, ya apartado del enorme ruido que rodea a sus empresas, muchas de ellas en situación de insolvencia, dedicará todo su tiempo y esfuerzo a dar una solución al problema de los fallidos pagarés de Nueva Rumasa.

«Me dedicaré de lleno y de forma exclusiva a buscar soluciones para devolver hasta el último euro a los tenedores de los pagarés, con los que moralmente estoy obligado», señaló el empresario en un comunicado divulgado ayer.

Ruiz-Mateos, que padece desde hace tiempo algunos problemas de salud, defendió la valía de su prole masculina como gestores de su ya caído imperio. «Están magníficamente preparados; sin pasión de padre, son muy capaces, muy honestos y extraordinariamente trabajadores», sentenció en su despedida. El empresario no perdió la oportunidad de cargar contra Emilio Botín y el grupo Santander, al que culpa de buena parte de sus males. Y aseguró que el banquero cántabro «junto a otros poderes fácticos» son los autores o responsables del «desequilibrio financiero que está sufriendo el grupo Nueva Rumasa».

La familia Ruiz-Mateos atraviesa un aluvión de concursos de acreedores en muchas de sus empresas, en los que los jueces les han apartado de la administración de muchas de estas firmas.