La propuesta de reforma de la política agraria común (PAC) presentada por el comisario de Agricultura y Desarrollo Rural, Dacian Ciolos, ha levantado críticas generalizadas en España. La ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, aseguró que la idea de Ciolos de recortar las ayudas a la producción y cambiarlas por una subvención directa ligada a la superficie «no sirve para que la agricultura juegue el papel estratégico en términos de seguridad alimentaria, económicos y empleo».
Tanto PSOE como PP coincidieron también en criticar el contenido de la propuesta, que calificaron de «gran decepción» y de «mala noticia» para el campo español.
Los ganaderos de leche y de carne, dos de los principales subsectores agrarios en Galicia, también rechazaron el texto, que aún debe ser negociado por los Veintisiete y la Eurocámara. El presidente de la Interprofesional Láctea (Inlac), Román Santalla, y el gerente de Asociación Española de Productores de Vacuno de Carne, Javier López, tildaron la propuesta de «negativa» para el modelo productivo de España, y «muy, muy en particular» para el sector lácteo.