Las tiendas y grandes superficies de Madrid podrán abrir las 24 horas y todos los días del año
ECONOMÍA
El Gobierno madrileño dice que la norma generará empleo y la oposición asegura que la medida afectará al pequeño comercio.
15 dic 2011 . Actualizado a las 21:20 h.La decisión del Ejecutivo autonómico madrileño de aplicar la libertad absoluta de horarios a todo tipo de comercios ha motivado este jueves reacciones discrepantes en el sector empresarial, sindical y de los consumidores.
El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha decidido dar libertad a todos los comercios madrileños para que puedan abrir a cualquier hora, todos los días del año, sea cual sea su superficie, según ha anunciado la presidenta Esperanza Aguirre.
La región «no tiene miedo a la libertad», ha afirmado Aguirre para justificar el anteproyecto de ley de Dinamización del Comercio madrileño, que debe ser sometido a consultas con varias organizaciones y después ratificado en la Asamblea, con la previsión de que entre en vigor la próxima primavera.
El anteproyecto incluye la libertad para que los comercios madrileños puedan vender alcohol o tabaco las 24 horas del día, los 365 días del año.
En cuanto a la ampliación de este permiso a todos los establecimientos independientemente de su superficie, el consejero de Economía, Percival Manglano, ha explicado que se ha adoptado a petición de la patronal madrileña.
El Gobierno madrileño asegura que la norma contribuirá al crecimiento económico y a la generación de empleo, aunque no se atreve a precisar los puestos de trabajo que podría crear.
Aguirre, que no ha consultado con el PP el contenido del proyecto, ha subrayado que además de la libertad de apertura comercial se agiliza la tramitación de licencias, para ahorrar hasta dos años de trámites a quienes deseen poner en marcha un negocio.
La presidenta madrileña se ha anticipado a las críticas al afirmar que los sindicatos y otros partidos «tienen proyectos muy respetables», pero ha cuestionado que sean realmente «útiles para generar crecimiento económico, bienestar, prosperidad y empleo».
Tras conocer el anteproyecto se ha producido un aluvión de comentarios, en gran parte contrarios.
Los grupos de oposición en la Asamblea de Madrid - PSOE, IU y UPyD - han rechazado la liberalización de los horarios por entender que perjudicará al pequeño comercio y no incrementará el consumo de los ciudadanos.
En la misma línea se han expresado los sindicatos CCOO y UGT, la Confederación de Comercio de Madrid, la asociación de consumidores Facua y la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, entre otros.
Así, la responsable de Comercio de CCOO Madrid, Paloma Vega, ha dicho a Efe que los ciudadanos no tienen necesidad de ese tipo de medidas, que van en beneficio de las grandes superficies, «que pueden cubrir todas sus necesidades» ya que «las pequeñas no pueden competir en horarios».
Vega ha expresado su temor a que los grandes comercios «monopolicen» el sector y ha recordado que anteriores medidas de horarios no han tenido efecto positivo en el empleo.
En la misma línea se ha pronunciado la responsable de Comercio de UGT-Madrid, María José Tajuelo, para quien es «falso» que se pueda generar más puestos de trabajo: «Es más, se destruye, porque ni siquiera hay puestos eventuales en las campañas especiales, como la de Navidad».
Tajuelo cree que con esas medidas liberalizadores, el pequeño comercio, «que es el noventa por ciento del sector, está abocado al cierre y convierte a sus propietarios en esclavos de sus negocios».
En favor del proyecto se ha pronunciado la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged), para la cual la decisión de Madrid supone equiparar las normas de funcionamiento del comercio a las que rigen para otros sectores de la economía.
«Se trata de que cada comerciante decida cuándo abrir en función de las preferencias de sus clientes, al igual que ocurre en otros tantos sectores como la hostelería, el ocio, el turismo», apunta una nota de la Anged, que destaca el efecto beneficioso que puede tener en el empleo.
El Ayuntamiento de Madrid, principal municipio de la región, apoya la liberalización total de los horarios comerciales, según el concejal responsable de Economía y Empleo, Miguel Ángel Villanueva, convencido de que «puede redundar en una dinamización de la actividad comercial de la ciudad».
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) también se ha mostrado a favor, porque recoge su reivindicación de libertad de horarios comerciales y es partidaria de la mayor flexibilidad horaria posible.