ACS hipoteca su filial más rentable para sanear su inversión en Hotchiefen

Erik Dobaño REDACCIÓN / LA VOZ, AGENCIAS

ECONOMÍA

Sitúa a Cobra como garantía de un crédito de 1.430 millones de euros

17 oct 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

ACS, la constructora de Florentino Pérez, está acusando el desplome de la cotización y de los resultados anuales de Hotchief, la compañía alemana en la que ejerce como accionista mayoritario desde julio del año pasado. ACS ha debido recurrir a la refinanciación de créditos (más endeudamiento) para sostener sus inversiones en Hotchief. Según confirmaron ayer fuentes financieras, la compañía que preside Florentino Pérez se ha visto obligada a situar a su filial Cobra -consultora de proyectos de ingeniería y fabricación de material industrial, una de las empresas más rentables del grupo, con una facturación de más de mil millones de euros- como garantía de un préstamo negociado en febrero de este año con 32 entidades financieras por un importe de 1.377 millones que posteriormente se amplió a 1.430 millones.

La operación permitió a ACS flexibilizar el plazo de vencimiento del crédito (en principio, mayo de este año) hasta julio del 2015. Esta refinanciación se hizo sobre un crédito inicial de 1.500 millones que ACS había pedido a Caja Madrid en el 2005, y que volvió a negociarse en el 2009 con un pool de bancos entre los que se encontraban, además de Caja Madrid (hoy Bankia), Santander, BBVA, La Caixa, Banesto, Banca March, Banco Sabadell, BBK, Cajastur, Banco Popular y Bancaja, además de otras entidades extranjeras. La deuda contraída para la adquisición de Hotchief (2.832 millones) también obligó este verano a la compañía de Pérez a ampliar hasta el 2015 un crédito de 602 millones de euros vinculado a su inversión en Hochtief.

Rivero y Soler, a concurso

Por otra parte, los juzgados de lo mercantil de Madrid número 5 y número 8 han declarado en concurso de acreedores a las sociedades Mag Import y Alteco Gestión, controladas por la familia Soler y el empresario Joaquín Rivero, con un pasivo de 773,4 y 1.648 millones, respectivamente. Las familias Rivero y Soler, ligadas al sector inmobiliario, solicitaron el 25 de septiembre el concurso voluntario de acreedores para sus sociedades, informa Efe.