Los trabajadores se manifestaron en los aeropuertos y están llamados a nuevos paros a principios y mediados de marzo
23 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Los trabajadores de Iberia pusieron fin ayer a la primera huelga de una semana que obligó a la cancelación de cientos de vuelos, sin que haya señales de un posible acuerdo sobre el plan de ajuste de la compañía, que prevé 3.800 despidos. Los trabajadores aseguraron que el seguimiento había sido del 100 % y que se habían cumplido los servicios mínimos. Se manifestaron en varios aeródromos, también en los gallegos. La principal concentración tuvo lugar en la terminal 4 del aeropuerto de Madrid. Están previstas nuevas jornadas de huelga del 4 al 8 de marzo y del 18 al 22 de marzo.
En la T-4 los manifestantes llevaban pancartas con el lema «British go home», en referencia a la fusión de la británica British Airways con Iberia para formar el consorcio IAG. Algunos vestían gorros de piratas y parches en el ojo, ondeando banderas con la calavera y las tibias como símbolo de lo que ven como un desmantelamiento de la compañía española en favor de la británica.
Similares concentraciones tuvieron lugar en otros aeropuertos. En A Coruña, donde el ERE propuesto por la dirección afectaría a 11 de los 62 empleados de Alvedro, todos ellos personal de tierra, se celebró una concentración que logró reunir a cerca de un centenar de personas, que, al paso de una marcha fúnebre, gritaron consignas como «Iberia no se vende, Iberia se defiende» o «Directivos, dimisión».
Mediación
Sobre la mediación a la que se ha sometido el conflicto, Mario Vidal, miembro del Comité de Empresa, aseguró: «Nos suena a cortina de humo, para quedar bien, nada más, así que nosotros seguiremos luchando, que es lo que nos queda», dijo, informa Patricia Blanco.
En Lavacolla la concentración reunió a una treintena de empleados, informa Mario Beramendi. La última de las cinco jornadas de huelga se saldó con la cancelación de tres vuelos, dos que enlazaban con Madrid y uno con Bilbao. También se cancelaron en Peinador, en Vigo, el vuelo que tendría que llegar de Madrid a las 06.25 y el que tendría que haber partido hacia la capital a las 08.10, informa Soledad Antón.
Iberia afirma que ha acumulado 850 millones de euros en pérdidas entre el 2008 y septiembre del 2012, justificando así un plan de ajuste que también prevé una reducción de un 15 % de su capacidad este año. Los trabajadores consideran, por su parte, que han sido traicionados y que se está sacrificando Iberia en beneficio de unos intereses extranjeros. «La dirección no quiere negociar. Queremos que el Gobierno intervenga y deshaga la fusión de Iberia con British Airways», dijo Silvia Navarro, una azafata de la compañía de 40 años.