Pescanova utilizó dos gestorías viguesas para emitir facturas falsas

A. B. MADRID / LA VOZ / EFE

ECONOMÍA

El 80 % de los ingresos de la pesquera entre el 2011 y el 2012 fueron ficticios

29 oct 2013 . Actualizado a las 10:22 h.

Tres trabajadores de dos gestorías de Vigo han reconocido ante el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz que directivos de Pescanova les pidieron que constituyesen sociedades desde las que la pesquera pudiese generar facturas falsas para financiarse y simular ventas. No en vano, el 80 % de los ingresos de la pesquera entre el 2011 y el 2012 fueron ficticios, según el informe forense elaborado por KPMG.

Camilo Rodríguez, Francisco Javier Fernández y Francisco Javier Retamar, que declararon la semana pasada como imputados en el caso que Ruz instruye sobre la pesquera, atribuyeron el encargo a distintos directivos de Pescanova, como Alfredo López Uroz, director financiero; Antonio Táboas, su predecesor en el cargo; y Joaquín Viña, jefe de auditoría y responsable de la consolidación contable del grupo empresarial. Los tres cargos también están imputados y su interrogatorio, previsto para esta semana, ha sido pospuesto a noviembre.

Los trabajadores de las gestorías aseguraron en su declaración en sede judicial que desconocían que, a través de una docena de sociedades instrumentales, sin ningún empleado, se realizaran hasta el 80 % de las ventas de la pesquera y que estas fueran simuladas, aunque fuentes jurídicas confirmaron que también le dijeron al juez que Pescanova corría con los gastos de constitución de las empresas, el traspaso de las acciones, las declaraciones tributarias e, incluso, les instaló un programa, un ordenador y una impresora para realizar los pagarés que entregaban a Pescanova como medio de pago en cada factura, que luego la compañía descontaba de las líneas de crédito bancarias, consiguiendo financiación adelantada.

Según las mismas fuentes, indica Efe, los imputados aseguraron que la pesquera quería que fueran ellos quienes gestionaran las sociedades instrumentales porque ella no podía, aunque no lograron explicar por qué motivo. Al parecer, solo uno de los tres logró que Pescanova le compensara todos los pagarés emitidos, cuyo abono les reclaman los bancos.

Hoy declaran en la Audiencia, en calidad de peritos, los responsables del informe forense realizado por KPMG.

Despido colectivo en Acuinova

Por otra parte, los trabajadores de Acuinova, filial onubense de Pescanova y también en concurso, han recibido del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Pontevedra el auto por el que se acuerda la extinción colectiva de los contratos de 22 de sus 25 empleados, los correspondientes a la planta de Ayamonte.

Según confirmó a La Voz el representante de los trabajadores de dicho centro laboral, los afectados van a recurrir la decisión de la jueza, que establece una indemnización de 20 días por año trabajado hasta un máximo de doce mensualidades, lo que supone cuantías que oscilan entre los 2.000 euros para el trabajador de menor antigüedad (apenas tres años) y los 46.700 para el que lleva más tiempo (26 años). El despido, basado en la inviabilidad económica de Acuinova, es efectivo desde el 22 de octubre, fecha del auto.