![La banca acreedora sigue buscando una salida al laberinto de Pescanova.](https://img.lavdg.com/sc/yyhh3xkEtu1SlehtR_-FK65KxF8=/480x/2014/01/29/0012_201401G29P31F1jpg/Foto/G29P31F1.jpg)
Las entidades acreedoras están buscando un socio industrial que fortalezca su propuesta
29 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.El presidente del Banco Sabadell, principal acreedor de Pescanova, José Oliu, ya lo advirtió la pasada semana: la banca puede acabar haciéndose con el control de la multinacional pesquera. Y en ello siguen trabajando las siete grandes entidades atrapadas en la empresa, además de la italiana UBI Banco. Esos bancos mantuvieron ayer una nueva reunión de varias horas, aunque sin llegar a pronunciarse sobre la última oferta del consorcio que lidera Damm.
De hecho, esos acreedores están buscando un socio industrial que refuerce su propuesta para garantizar el futuro de la sociedad gallega, es decir, que aporte la experiencia en gestión que ellos no tienen. Porque precisamente esa -la experiencia industrial en el sector- es la mayor baza con la que cuenta el grupo que comanda la cervecera catalana para acabar controlando Pescanova. La tercera oferta formal presentada, la que ha llegado de la mano de los fondos de inversión Centerbridge y BlueCrest, también carece de bagaje en gestión.
Según fuentes cercanas a las negociaciones, la banca ya ha mantenido algunos contactos para encontrar ese socio, sobre todo en el mercado internacional.
«No sabemos nada»
Fuentes conocedoras de la reunión que se celebró ayer, y que aún proseguía al cierre de esta edición, aseguraron que sobre la mesa ni siquiera estuvo la propuesta de Damm, Luxempart y los fondos KKR y Ergon Capital Partners. La víspera, este consorcio anunció estar dispuestos «a aceptar las peticiones de la banca». La traducción práctica es que se avenían a rebajar a menos del 80 % la quita que ha de aplicarse a la deuda de la multinacional (en un primer momento su exigencia llegó al 92 %), además de darle entrada a los bancos en el capital de la empresa con una participación del 10 %. La propuesta incluía a los accionistas minoritarios, que igualmente tendrían presencia en la multinacional gallega, con un peso del 2 %.
Pero las nuevas condiciones publicitadas el lunes por los responsables de la oferta de Damm tampoco han tenido una buena acogida en las entidades acreedoras, que ayer declaraban «no saber nada» oficialmente.
Sin condiciones
Y no solo eso. Fuentes financieras insistieron en que la banca «no puso condiciones a Damm». «Únicamente dijimos que no nos gustaba su oferta. Y sigue sin gustarnos», añadieron.
Las mismas fuentes dejaron claro que la reunión de los ocho grandes acreedores -bautizados como G8- se centró en trabajar sobre la propuesta de la propia banca y no sobre la flexibilización de la postura del consorcio en la suya.