El primer año con los tipos al alza deja cuotas disparadas y un desplome en la firma de hipotecas

J. M. Camarero MADRID / COLPISA

ECONOMÍA

CAPOTILLO

Galicia es la segunda comunidad de España donde más cae la constitución de préstamos para comprar vivienda, un 36 %

21 jul 2023 . Actualizado a las 19:51 h.

Cuando la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, anunció hace ahora 12 meses que la institución subía los tipos de interés de la zona euro los ciudadanos dijeron adiós a seis años con los intereses en el 0 %, que los habían acostumbrado a afrontar unas cuotas hipotecarias asequibles. Pero casi nadie imaginaba que la carrera en la que entonces entraba la institución monetaria provocaría la mayor escalada de tipos que se recuerda.

Transcurridos 365 días, el precio oficial del dinero se encuentra ahora en el 4 %. ¿Qué ha provocado esto? Que la mensualidad de una hipoteca media haya pasado de 500 a más de 700 euros o roce, en algunos casos, los 800, dependiendo del diferencial pactado y los años de antigüedad del préstamo. Esa es la realidad que han tenido que digerir los hipotecados españoles, ya que en su gran mayoría los créditos para vivienda que tienen contratados se encuentran vinculados al euríbor, un indicador que evoluciona muy ligado al tipo de interés que fija el BCE.

El problema financiero para muchas familias y empresas es que el objetivo que se fijo Lagarde cuando empezó a subir los tipos —reducir la tasa de inflación al 2 %, el objetivo de estabilidad que marca el Tratado de Maastricht— sigue sin cumplirse. Es más, desde aquellas declaraciones de finales de julio del año, los precios siguieron subiendo hasta alcanzar en octubre un pico máximo del 10 %. Y aunque desde finales del año pasado se ha ido conteniendo, la tasa de la inflación en la zona euro es aún muy elevada, del 5,5 % interanual, según el último dato de Eurostat.

De ahí que el BCE tenga previsto elevar la próxima semana los tipos de interés. Y lo hará previsiblemente hasta el 4,25 %. Lagarde no descarta incluso volver a subir el precio del dinero después del verano, aunque la decisión dependerá de cómo evolucionen los precios en toda la zona euro. Al unísono. Y de forma estructural, por más caídas coyunturales que se produzcan.

Los españoles seguirán pagando aún más por sus hipotecas. Las subidas de las cuotas no serán ya tan exponenciales como las que han sufrido. Pero el movimiento alcista no ha parado. Tampoco para las empresas, cuyos costes de financiación también se han incrementado hasta niveles que no se veían desde el 2008, cuando estaba a punto de llegar la gran recesión mundial.

Frenazo inmobiliario

El aumento de los tipos ha tenido otra consecuencia sobre la que ya advertían los analistas: la caída del mercado inmobiliario. No se trata de una parálisis completa, ni mucho menos. Pero sí de un goteo de estadísticas que muestra que muchos ciudadanos no están dispuestos a comprar una vivienda cuando para financiarse tienen que pagar unos intereses que se sitúan, de media, por encima del 3 %.

El INE confirmó este viernes que el número de hipotecas constituidas sobre viviendas bajó un 24 % en mayo respecto al mismo mes del 2022, su mayor descenso en casi dos años y medio, hasta sumar 33.398 préstamos. En Galicia la tendencia es todavía peor, ya que la caída fue del 36 %, la segunda mayor de todo el país.