Opa hostil del BBVA al Sabadell: ¿Por quién tomarán partido las decenas de accionistas que comparten los dos bancos?
ECONOMÍA
Un tercio de los inversores, entre ellos Blackrock, Norges Bank y Vanguard, tienen intereses en ambas entidades
10 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.La opa hostil del BBVA al Sabadell entraña muchos riesgos. Y es que el Sabadell es un banco con un capital muy atomizado, para bien y para mal. Según su último informe financiero, el 52% son accionistas institucionales (grandes fondos de inversión y corporaciones) mientras que el 48% restante son minoristas (particulares y pequeñas empresas).
Tomar el control de la entidad financiera no será sencillo. Y no solo por el elevado número de inversores particulares que tiene el Sabadell. Un tercio de sus accionistas también participan en el BBVA, así que deberán tomar partido por uno de los dos bancos.
Según datos de Bloomberg, habría un total de 71 inversores en esa tesitura. Su decisión será clave para poder despejar el futuro de la opa. El más grande es Blackrock. El fondo de inversiones estadounidense controla el 3,125% del banco de origen catalán, pero también es propietario del 5,48% del BBVA, por lo que podría inclinar la balanza hacia la entidad que preside Carlos Torres o hacerse de rogar un poco más de tiempo para sacar ventaja de la contienda.
En una situación similar se encuentra el gigante global de las inversiones: Vanguard Group. Posee el 3,49% del Sabadell y el 5,18% del BBVA.
También el banco central noruego, Norges Bank —gestiona las inversiones del fondo soberano de ese Estado— tiene intereses en las dos entidades a partes iguales: un 3,09% en el BBVA y un 3,11% en el banco presidido por Oliu.
Otros accionistas que también tienen un pie en cada banco y tendrán que sopesar qué hacer son JP Morgan, Goldman Sachs, UBS, Allianz, BNP Paribas, Crédit Agricole, HSBC, el Gobierno de Japón y hasta los grandes competidores de los bancos en contienda: Santander y Caixabank.
El gran problema para el Sabadell es que, aunque tiene una masa de 213.560 accionistas —a cierre del 2023—, solo 27 concentran un 44% del capital y otros 137 controlan el 9,46%. Cualquier baja podría suponer un gran revés.
Entre todos los grandes inversores de la entidad destaca el empresario mexicano David Martínez Guzmán. El multimillonario es en la actualidad el principal accionista del banco y está vinculado a su organigrama, siendo propietario directo del 3,495% e indirecto del 3,105% a través de Fintech Europe. Por ello, sería extraño que se plegara a la oferta del BBVA.
¿Qué hay del resto del consejo de administración? El presidente, Josep Oliu, posee el 0,13% del capital y el consejero delegado, César González-Bueno Mayer, apenas un 0,02%. Entre ambos tan solo suman casi 16 millones de euros en títulos del banco, muestra de lo fragmentado que está su capital.
Con este panorama, será difícil despejar el camino —sea el de la compra o el esquinazo definitivo—. Lo cierto es que los grandes inversores no se mueven, como un buen número de minoristas catalanes, por el arraigo territorial, sino por el escenario que les reporte mayores beneficios. La creciente concentración y competitividad en el sector financiero, además de los exigentes requisitos de liquidez y solvencia hacen que muchos sopesen la conveniencia de fusionar entidades para reducir costes y aumentar la rentabilidad. «Los bancos van a necesitar aún más capital durante los próximos años cinco años [...] En ese difícil contexto, el mercado no favorece a los pequeños», señala el director de Eurocofín y profesor de OBS Business School, Carlos Balado.