La brecha salarial se reduce diez puntos en la última década hasta el 8,7%, cuatro puntos menos que la media europea, según Funcas
19 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Sigue siendo una asignatura pendiente, no solo en España, sino en la mayor parte del mundo, pero se está avanzando. La brecha de género se ha reducido en diez puntos porcentuales en la última década e incluso en el caso de los jóvenes se ha producido el sorpasso: las mujeres menores de 25 años ganan ya más que los hombres gracias a que tienen una mejor formación. Así lo asegura un informe de Funcas publicado ayer con motivo de la celebración del Día Internacional de la Igualdad Salarial en el que analiza el salario por hora que reciben, de media, mujeres y hombres en España.
Concretamente, la brecha salarial se ha recortado más de la mitad en 10 años al pasar de estar en el 18,7 % en el 2012 al 8,7 % en el 2022. Este fenómeno de reducción se ha producido en la mayor parte de los estados comunitarios, pero ha ido más rápido en España. De esta forma, el país ha pasado en esta última década de estar por encima de Europa en brecha salarial, a quedarse por debajo: cuatro puntos menos que la media de la Unión Europea (12,7 %).
Las mayores brechas salariales de género se encuentran en países del este de Europa, pero también en Austria y Alemania, donde rondan el 18 %. En Bélgica, Rumanía e Italia, estados con tasas de actividad femenina relativamente bajas, la brecha salarial de género se situaba por debajo del 6 %. El único país europeo en el que el salario por hora de las mujeres supera al de los hombres es Luxemburgo, donde ellos ganan un 1 % menos.
Formación y edad, claves
Esta fuerte reducción de las diferencias salariales no puede desvincularse del «vuelco formativo» de las generaciones más jóvenes de mujeres. Su nivel educativo, más alto por término medio que el de sus pares varones, ha contribuido a su acceso a puestos de trabajo de mayor categoría y remuneración, y es por esto que desde el 2019 se ha producido ya el sorpasso entre los menores de 25 años. A medida que las generaciones más antiguas, con una brecha salarial más elevada, se jubilan y salen del mercado laboral, son reemplazadas por cohortes de trabajadores jóvenes entre quienes la desigualdad salarial es significativamente menor o, incluso, se revierte.