Dos tercios de los gallegos piden más eólica y presencia pública en el sector

Más de dos tercios de los gallegos consideran que es necesario acometer un impulso a las energías renovables en la comunidad; y en concreto, un 76,2 %, a la eólica. Es una de las conclusiones del Barómetro Trimestral de Sondaxe, en el que se evidencia que, pese al bloqueo que padece actualmente el sector debido a las suspensiones judiciales, no existe un rechazo mayoritario a generar electricidad con la fuerza del viento en la sociedad gallega.

Y es precisamente en Ourense y en A Coruña —la segunda provincia más eólica de las cuatro y la quinta con más generación del país durante el 2023— en donde existe un mayor respaldo a acelerar la instalación de infraestructuras renovables. En Ourense se muestran favorables un 80,6 % de los encuestados; y en A Coruña, un 77,6 %. En el extremo contrario se encuentran los pontevedreses: tienen el menor respaldo y la mayor cuota de los que consideran que no debería de promoverse ni un parque más.

El 67 % de los gallegos rechazan el coche eléctrico por la mala red de recarga y el precio elevado

M. S. D.

El perfil con una mayor sensibilidad hacia la energía eólica es el de una mujer mayor de 65 años. No es de extrañar, por tanto, que sean los jubilados y los pensionistas los que evidencien una mayor sensibilidad hacia un sector que, no obstante, tiene actualmente cercenadas sus posibilidades de crecimiento, por cuanto que hay más de 60 parques suspendidos en la comunidad. 

Son los habitantes de municipios pequeños, de entre 5.000 y 10.000 habitantes —en los que habitualmente se asientan las instalaciones energéticas— los que apoyan mayoritariamente las instalaciones renovables. 

Por intención de voto

El barómetro de Sondaxe refleja también que son los votantes de Democracia Ourensana los más convencidos de la necesidad de promover las energías verdes en la comunidad. Tanto, que el 100 por 100 de los encuestados de ese partido se muestran favorables. Le siguen, con un 84,2 % de respaldo, los votantes del Partido Popular; y con un 79,1 %, los del PSOE. El apoyo cae hasta el 73,9 % entre los nacionalistas, aunque son los simpatizantes de Vox los que muestran la menor simpatía con el despliegue de este mercado.

En un contexto en el que todas las Administraciones coinciden en la necesidad de que los proyectos para instalar plantas energéticas cuenten con la sensibilidad del entorno e impliquen beneficios sociales para los municipios en los que se ubican, existe una mayoría de encuestados que defienden una mayor participación pública en los proyectos. De nuevo son los jubilados y pensionistas, seguidos de los asalariados, los que concentran el mayor número de convencidos. Igualmente, los votantes de Democracia Ourensana y el PP se sitúan entre los que muestran un mayor respaldo, aunque en este caso, los del BNG adelantan a los socialistas y defienden, en un 76,3 %, la participación pública.

Respaldo a la estrategia de la Xunta del uso de los recursos naturales

A finales del pasado año echó a andar la sociedad público-privada Recursos de Galicia (RDG). Cerca del 70 % de los gallegos —en concreto el 67,3 %— respaldan la estrategia de la Xunta en el impulso a esa empresa, en donde ostenta el 30 % del capital, mientras que el restante se lo reparten 32 firmas. Que el uso de los recursos propios de la comunidad revierta en beneficios para los vecinos es uno de los objetivos de RDG. Cerca del 72 % de los jubilados y pensionistas y el 70,7 % de los empleados del hogar se pronuncian favorables a esa política, que también respaldan mayoritariamente los votantes de Democracia Ourensana y del PP. Los del BNG, con un 56,5 %, son los menos proclives.

Crece la preocupación por la falta de vivienda, la segunda cuestión que más inquieta

M.M.

 

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