Arteixo Telecom prevé aumentar la facturación este año un 30 % y ampliar su cartera de clientes

f. fernández FERROL / LA VOZ

ECONOMÍA

CESAR TOIMIL

El principal accionista de la fábrica de electrónica industrial de As Pontes, dispuesto a dar entrada a un nuevo inversor

17 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuando el arquitecto técnico Rafael Valcarce tomó las riendas de la fábrica de electrónica industrial Arteixo Telecom, en el año 2000, la empresa contaba con 300 empleados, pero no tenía carga de trabajo. La reconversión que se vio obligado a acometer para intentar salvar a la empresa del cierre lo llevó, en el 2005, a realizar una mudanza y a trasladar la planta desde el concello que da nombre a la compañía hasta el de As Pontes. Pero las dificultades no acabaron ahí y, de hecho, los problemas de liquidez para hacer frente a las deudas desembocaron en la entrada en concurso de acreedores en el 2014, un procedimiento del que está a punto de salir y, además, con planes de crecimiento.

Valcarce, presidente y principal accionista de Arteixo Telecom (con el 71 % del capital), avanza que el 2024 se cerró con una facturación de 13 millones de euros, que espera convertir en 16,3 millones cuando acabe este 2025. Pero la cifra de negocio para el presente ejercicio podría dispararse incluso un 30 % hasta los 19,5 millones si prosperan las negociaciones que mantiene con un nuevo e importante cliente, del que «nada puedo decir aún». Si cierran el trato, el futuro comprador se unirá a una larga lista de compañías que confían en Arteixo Telecom para montar sus sistemas electrónicos. Entre las principales, ADIF, Indra, Sener, Centum, Siemens o Hitachi. Arteixo Telecom compra los microchips para montar las placas electrónicas que conforman el corazón de los sistemas. Las que suministra a ADIF, por ejemplo, sirven para el control de las comunicaciones tren tierra de las líneas ferroviarias convencionales de toda España (salvo la alta velocidad). Las que suministra a Indra forman parte del sistema de aterrizaje y despegue de aviones en los aeropuertos. No solo en los españoles, también en los de la Antártida y el Sáhara.

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El presidente de la compañía avanza que los planes de expansión se traducirán también en un aumento de la plantilla, compuesta ahora por ochenta profesionales.

Además de montar, los ingenieros de Arteixo Telecom están capacitados para mejorar las propuestas enviadas por los clientes e incluso para diseñarlas. «A diferencia de otras plantas de electrónica industrial, «nosotros tenemos ingeniería de proceso y producto, y cuando vinieron mal dadas mimé ese departamento porque sabía que era nuestro fuerte», explica Valcarce.

El responsable de la firma resalta que «no dependemos de un solo sector». Así, el negocio de defensa y aeroespacial proporciona el 38 % de la facturación; el ferroviario, el 29 %; y renovables, el 19 %, entre los principales.

Valcarce reconoce que se mueve en un «mercado muy competitivo» en el que ha habido un cambio de tendencia: Europa quiere sus propias fábricas para no depender del exterior. Por eso, «en el mundo industrial hay mucho movimiento, porque a las empresas pequeñas no les es fácil sostenerse». De hecho, admite que periódicamente recibe ofertas de compra para su empresa. Asegura que no está en venta, pero «yo estoy abierto siempre a la posibilidad de incorporar a un socio industrial, no a un fondo de inversión, el porcentaje habría que estudiarlo». Eso sí, tendría que tratarse de una empresa del ramo que «tenga unos valores de reconocimiento, porque yo no sería nada si el personal no fuera el que es».