
Antonio Garamendi defiende que, antes de subir el SMI, es necesario pensar en lo que pueden pagar los autónomos y los pequeños empresarios
20 ene 2025 . Actualizado a las 17:37 h.El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha levantado una auténtica polvareda al ser preguntado sobre si un sueldo de 1.134 euros al mes (el equivalente al SMI) es serio. En plena negociación por la subida del salario mínimo interprofesional —que el Ministerio de Trabajo prevé incrementar en 50 euros al mes, hasta alcanzar los 1.184— el jefe de los empresarios concedió una entrevista a RTVE, una charla en la que la periodista Silvia Intxaurrondo le preguntó si consideraba digno un salario mensual de 1.134 euros. «Es que la pregunta que me está haciendo no es muy seria. ¿Tú crees que alguien que tiene un pequeño establecimiento en un pueblo tiene capacidad de pagar 2.000 euros al mes en un bar al que entran cuatro?», respondió Garamendi, unas declaraciones que han provocado gran polémica en las redes sociales.
El líder de la CEOE ha insistido en que, antes de subir el SMI, se debe pensar en lo que pueden pagar los autónomos y los pequeños empresarios: «Y esos señores muchas veces no ganan ni eso, esa es la realidad del asunto», añadió para, a renglón seguido, incidir: «Lo que hay que hacer es implementar, trabajar en una línea, de hacer un planteamiento mucho más serio de lo que es la economía que tenemos y hacer inversiones en productividad, eso es lo que tenemos que conseguir, y mientras tanto, esto es lo que una empresa puede pagar, porque realmente los que pagan estos salarios son los más débiles. La mayoría de las empresas, las que yo represento, no están en esta línea, esto es así también».
Las declaraciones han encontrado pronta respuesta por parte de la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo que, a través de su cuenta de X, ha criticado duramente las palabras de Garamendi: «Qué fácil es decir esto cuando cobras 25 veces el SMI al mes. Esto sí que no es serio».
El líder de la CEOE ha aclarado que no está diciendo que no se negocie sobre horas o subidas del SMI, «pero lo que no vale es que la política entre, aquí sí que entra a saco, para decir, no, esto es así porque aquí creo que voy a sacar algún voto más».
En este sentido, Garamendi aseguró que «no entiende» que el Gobierno esté separando «por tramos o por fascículos» temas que afectan a los costes de las empresas, como son la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) y la reducción de la jornada laboral hasta las 37,5 horas semanales.
«Parece que, por un lado, va la jornada laboral, parece que, por otro lado, va el salario mínimo, parece que, por otro lado, van las cotizaciones sociales, cuando es un todo, y nosotros queremos hablar del todo. No se puede estar planteando temas directamente de una y otra manera, porque si no estuviera encima la mesa el tema de las horas, pues posiblemente estaríamos hablando del salario mínimo. Lo que hemos dicho es que hay que hablar de todo y en conjunto», ha subrayado en declaraciones a TVE y también a Telecinco.
El dirigente empresarial ha denunciado que el Gobierno, con sus planteamientos, no está pensando en los pequeños comercios, en los bares o en el campo, ni tampoco habla de indexar el SMI en los contratos públicos. «Nadie habla nunca de lo que es la indexación que hay que hacer para todas las empresas que trabajan con la Administración. Te suben los costes en cuanto son los salarios, pero, sin embargo, lo que es la concesión, solo en esa materia, no sube», ha criticado.
Sobre cuánto debería subir el SMI este año, Garamendi ha recordado que existe un acuerdo con los sindicatos, el AENC, donde se establecen las bandas salariales para cada año del periodo 2023-2025. «Nosotros estaríamos siempre en las bandas que hemos firmado con los sindicatos para el año 23, 24 y 25», ha apuntado el dirigente empresarial. Dicho acuerdo recomendaba alzas salariales del 3 % para 2025.
En todo caso, ha insistido en que el SMI y la jornada, que afectan en ambos casos a los costes de las empresas, tienen que verse en conjunto. «No hay cómo tener un asalariado para saber qué es lo que significa, eso es lo que nosotros estamos reclamando y demandando, y, desde luego, son decisiones políticas, sinceramente, bastante alejadas de muchas veces de la realidad», ha cuestionado.
Agradece al ministro Cuerpo «su moderación»
Al hilo de lo anterior y preguntado por si su sintonía es mayor con el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, que con la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, Garamendi ha declarado que agradece «muchísimo» a Cuerpo «su diálogo, su moderación y su intento permanente de llegar a acuerdos».
«Yo creo que estamos en un momento totalmente radicalizado, todo se radicaliza y creo que se pueden defender posturas desde la moderación, desde la tranquilidad y Carlos Cuerpo, en este caso, creo que es un ejemplo de ello», ha opinado.
El dirigente empresarial ha calificado de «monólogo social» las reuniones que se mantuvieron con el Ministerio de Trabajo y los sindicatos para la reducción de jornada, pues el resultado, las 37,5 horas semanales, ya estaba predeterminado, sin posibilidad de negociar.
«La ministra llama diálogo social a algo que no es. El diálogo social es tripartito, el bipartito es solo de trabajadores y empresas», ha dicho, para insistir en que el acuerdo entre Trabajo y CCOO y UGT para rebajar la jornada no es diálogo social, sino un acuerdo entre ellos.
Respecto al fondo de la cuestión, el líder de la patronal ha defendido que el 25 % de los convenios reconocen una jornada laboral de 37,5 horas semanales y ha asegurado que CEOE no tiene «ningún problema» en hablar de reducciones horarias, pero dentro de la negociación colectiva, y de forma que cada empresa o sector decida sobre la extensión y distribución de la jornada, en función de sus posibilidades y productividad.