Arrecia la crisis de vivienda en Portugal: se han duplicado los precios en 7 años

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Carlota Ciudad

Este fin de semana hay convocadas manifestaciones en 13 ciudades del país vecino. El Gobierno luso quiere templar el mercado construyendo en esta legislatura 59.000 viviendas públicas

28 jun 2025 . Actualizado a las 14:01 h.

La crisis habitacional se expande más allá de las fronteras gallegas. Si en Galicia han desaparecido un tercio de los pisos en alquiler en cuestión de cuatro años, empujando al alza los precios, al otro lado de la raia, en Portugal, el número de nuevos contratos de arrendamiento ha tocado mínimos históricos. Y no solo eso.

Desde que el ex primer ministro luso, António Costa, lanzara su promesa de «casa para todos», allá por el 23 de abril del 2018, los precios se han duplicado en el país vecino. Y eso que los sucesivos gobiernos pusieron en marcha toda clase de medidas. Un ejemplo: la promoción de alquileres asequibles. El Ejecutivo de Costa se comprometió a ofrecer beneficios fiscales a los propietarios que ofreciesen contratos de alquiler de tres años como mínimo a un precio un 20% inferior al del mercado. Además, conscientes de que las zonas tensionadas del país, como Lisboa y Oporto, se estaban convirtiendo en un polo de atracción para inversores extranjeros, ávidos de hacer dinero rápido con las viviendas turísticas, el Ejecutivo luso decidió en el 2023 poner coto a este tipo de inmuebles, limitando las licencias, elevando su fiscalidad y suprimiendo de forma parcial la famosa «visa dorada» cuando estuviera vinculada a activos inmobiliarios —esta otorga el derecho de residencia a ciudadanos de otros países que invierten en Portugal—. Algunas de estas medidas fueron revertidas a posteriori por el primer ministro conservador, Luís Montenegro.

Recientemente, presentó su nuevo plan para esta legislatura. En ella ha incluido una bajada generalizada de impuestos, un programa para la construcción de 59.000 viviendas públicas y una mayor flexibilidad normativa para permitir, si los ayuntamientos así lo determinan, la construcción de inmuebles en suelos rústicos, con el objetivo de aumentar la oferta.

Protestas en la calle

Mientras tanto, las protestas en la calle se multiplican. Este fin de semana se desarrollarán manifestaciones en 13 ciudades del país vecino, reclamando el derecho a una vivienda asequible.

El problema se ha extendido a otros países de la UE. Es tal la emergencia que Bruselas está trabajando en el Plan Europeo de Vivienda Asequible, que presentará en el primer trimestre del 2026.