La empresa gallega E.nova Enerxía estrena su primera planta de generación energética distribuida

Beatriz García Couce
Beatriz Couce REDACCIÓN

ECONOMÍA

La planta de Peradela Solar en Sevilla
La planta de Peradela Solar en Sevilla Cedida

La pyme invirtió 825.000 euros en una planta que abastecerá a 550 hogares

01 jul 2025 . Actualizado a las 17:51 h.

La pyme compostelana E.nova Enerxía acaba de poner en funcionamiento su primera planta de generación de energía distribuida. Bautizada como Peraleda Solar, está ubicada en la localidad sevillana de Pilas, provincia de Sevilla. Según explica la firma, la generación distribuida es un modelo descentralizado que apuesta por producir energía cerca del punto de consumo, reduciendo pérdidas, aumentando la eficiencia y reforzando la resiliencia del sistema. «Peraleda Solar es un ejemplo claro de este enfoque, en el que las infraestructuras se integran mejor en el territorio y responden a las necesidades reales de la población y de la industria local», subraya la compañía.

La instalación producirá energía limpia para abastecer a cerca de 550 hogares y evitará la emisión de 686 toneladas de CO2 cada año. Ocupa una superficie de 2,5 hectáreas y cuenta con una potencia instalada de 1 megavatio pico (MWp). Esto le permitirá producir alrededor de 1.922.140 kWh al año.

La puesta en marcha de Pilas Peraleda Solar, que requirió de una inversión de 825.000 euros, es el primer paso de un plan más ambicioso de la empresa, que impulsa una cartera de proyectos de generación distribuida en otras provincias españolas, tanto con tecnología fotovoltaica como hidroeléctrica.

«Queremos demostrar que otra transición es posible. Más distribuida, más eficiente y más conectada con la realidad social y productiva de cada zona», afirmó Xurxo López González, director ejecutivo de E.nova Enerxía. Además, añadió que, «desde Galicia, demostramos que también las pequeñas empresas pueden liderar proyectos estratégicos de generación renovable en cualquier parte del Estado. Es una forma de hacer país y de contribuir, con hechos, a una transición energética más sostenible y descentralizada».