La guerra entre BBVA y Sabadell acerca a la bolsa a otro año histórico de dividendos
ECONOMÍA

Los inversores recibirían unos 40.000 millones de euros este mismo año si finalmente se cumplen los abonos previstos hasta el mes de diciembre
13 oct 2025 . Actualizado a las 11:44 h.Los cazadividendos están de enhorabuena. La Bolsa española se prepara para cerrar un 2025 casi histórico en el que, además de ser la mejor de Europa con una revalorización del 33 %, puede presumir de ofrecer a sus inversores un extra con esos ingresos recurrentes por las políticas de remuneración de sus cotizadas.
La lluvia de dividendos ya ha regado con 29.212 millones de euros a los accionistas hasta septiembre, un 10 % más que en el mismo período del año anterior, cuando desembolsaron 37.507 millones de euros en todo el ejercicio (sin contar con las recompras de acciones), según datos de Bolsas y Mercados Españoles (BME). Si se cumplen las previsiones, de aquí a final de año aún tienen que hacer sus pagos gigantes como Inditex, BBVA, Santander o Telefónica, más los esperados de CaixaBank, Ferrovial, Bankinter o Enagás ya en diciembre. Todo apunta a que, con las estimaciones del mercado, el Ibex terminará repartiendo cerca de 40.000 millones entre sus inversores, solo superados por el récord de 43.200 que se entregaron en el 2014.
Según un estudio de Capital Group, han sido dos los factores que han colocado a España como el país europeo donde más crecen estos pagos, junto a Dinamarca. Por un lado, el dividendo de Aena, que en abril abonó 9,76 euros brutos por acción, un 27,4 % más, gracias a unos positivos resultados marcados por la buena marcha del turismo en España. Por otro, el sector bancario, que ha entrado de lleno en el podio de los más generosos gracias a una temporada de beneficios récord y a unos niveles de capital que permiten seguir premiando al inversor pese a la incertidumbre por los conflictos geopolíticos y arancelarios. Pero si hay un punto que ha determinado esta lluvia de dinero, ese ha sido la opa de BBVA sobre Banco Sabadell.
El mayor de la historia
La guerra por atraer —o retener en el caso de la catalana— al accionista ha llevado a la entidad vasca a anunciar el mayor dividendo a cuenta de su historia, de 0,32 euros por acción, que abonará el próximo 7 de noviembre. Según la ecuación de canje (una acción de BBVA por cada 4,8376 del Sabadell) a los accionistas que acudan a la opa les corresponderían seis céntimos por acción. Y cabe recordar que la política de remuneración del banco contempla un payout anual de entre el 40 % y el 50 % del beneficio consolidado.
La catalana hace tiempo que desplegó toda su artillería. Desde que se lanzó la opa, ha elevado en hasta seis ocasiones su objetivo de retribución, con el histórico dividendo extraordinario de 2.500 millones de euros por la venta de su filial británica TSB como protagonista. Esa operación le permitirá repartir 0,5 euros por acción en el primer trimestre del 2026, a lo que se sumarán los dividendos ordinarios que alcanzarán, según esperan, los 1.450 millones.
Con esta generosidad sobre la mesa, el resto del sector empieza a mover ficha para no quedarse atrás. Banco Santander anunció recientemente un dividendo de 11,5 céntimos por acción que pagará el 3 de noviembre, un 15 % más. En total, tiene previsto remunerar con unos 3.400 millones a cuenta del 2025, la mitad en efectivo y el resto con su actual programa de recompra. La gran pregunta es si la banca podrá seguir con este ritmo de mejora de la retribución en los próximos trimestres. «Pensamos que en el 2026 se mantendrá sin problemas, pero tenemos más dudas después», apunta Javier Cabrera, analista de mercados. «La banca española tiene un balance muy sólido y un exceso de capital con respecto a las exigencias del regulador, lo que le permitirá en el corto plazo satisfacer esas promesas de remuneración; el problema viene con la situación actual de los tipos», añade el experto.
Es decir, si el BCE mantiene las tasas de referencia en el 2 % durante los próximos años, las entidades podrán continuar el ritmo de reparto «aunque no veremos estos incrementos recientes cada año». Por el contrario, si hay caídas en los tipos, la remuneración al accionista «se complicará, porque el crecimiento de los beneficios no podrán financiarla y la banca tendrá que tirar de reservas».
Más allá de la banca
En todo caso, hay vida más allá del sector en términos de generosidad con los inversores. «Compañías como Naturgy, Repsol o Unicaja tienen una rentabilidad por dividendo elevada y en el corto plazo no deberíamos ver grandes cambios en su política de remuneración», recuerda Cabrera. «Es verdad que algunas de ellas enfrentan un escenario desafiante, como la propia Repsol con la caída de los precios del petróleo o la banca con la caída de tipos. Sin embargo, otras como Naturgy o Iberdrola tienen un panorama más estable con un negocio algo más diversificado», añade el experto.
El dividendo seguirá siendo así uno de los mayores atractivos del parqué nacional. Actualmente, y pese al rali bursátil, seis compañías del Ibex 35 presentan una rentabilidad por dividendo (proporción de ingresos que el inversor recibe en forma de dividendos en relación con el precio de la acción) del 6 % o superior, doblando la que ofrece el bono español. «Las empresas que reparten dividendos han servido como un puerto en la tormenta, ofreciendo un colchón cuando los mercados se vuelven turbulentos», apunta Mario González, responsable de Capital Group en Iberia. «Su capacidad para generar ingresos incluso en épocas de recesión las convierte en un ancla para los clientes que buscan resiliencia y fiabilidad», añade el experto.