Rechazo político a las declaraciones en las que el ex presidente admite que se planteó «volar» a la cúpula de ETA

Nacho de la Fuente
Nacho de la Fuente REDACCIÓN/LA VOZ.

ESPAÑA

09 nov 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

«Tuve una sola oportunidad en mi vida de dar una orden para liquidar a toda la cúpula de ETA [...] En aquel momento solo cabía la posibilidad de volarlos a todos juntos en la casa en la que se iban a reunir. Ni te cuento las implicaciones que tenía actuar en territorio francés, no te explico toda la literatura, pero el hecho descarnado era: existe la posibilidad de volarlos a todos y descabezarlos. La decisión es sí o no. Lo simplifico, dije: no. Y añado a esto: todavía no sé si hice lo correcto»...

Estas palabras del ex presidente del Gobierno Felipe González en una entrevista en un diario madrileño han desatado un aluvión de críticas. Los únicos apoyos a González vinieron de su propio partido. El presidente del Congreso, José Bono, afirmó que lo que dijo González forma parte del pasado y que los hechos que entonces ocurrieron ya «han sido juzgados». Ayer, Felipe González dijo en Colombia que aún tiene dudas de si hizo lo correcto e insistió en que «el conflicto moral» aún «prevalece».

Horrible delito

Desde el principal partido de la oposición, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, cree que el propio González «se ha puesto» en situación de decir que él mismo era la «X» de los GAL, y destacó que en la lucha contra el terrorismo «los atajos», al final, «ni son provechosos ni son aceptables», informa Efe. El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, reclamó a González que pida disculpas por sus palabras y tildó de sorprendente que durante catorce años haya dudado sobre algo tipificado en el Código Penal como de «horrible delito». El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, recordó que el «enemigo a batir» por los demócratas en España «no es Felipe González, sino ETA».

Cayo Lara, coordinador federal de IU, le recriminó que haya tenido «alguna duda» sobre la aplicación del Estado de derecho. Igualmente duras fueron las críticas desde el nacionalismo vasco y, así, el portavoz del PNV en el Parlamento vasco, Joseba Egibar, aseguró que Felipe González hizo «un abierto reconocimiento de responsabilidades» en lo que se refiere al terrorismo de Estado.

También reprobó las declaraciones de González el presidente de Ezker Batua, Serafín Llamas, quien reclamó a la Fiscalía General del Estado que investigue las declaraciones. Patxi Zabaleta, portavoz de Nafarroa Bai, lo calificó de enormemente grave porque se pone en «entredicho» la seriedad de las estructuras del Ejecutivo.