Otros políticos se han apartado del cargo para luchar contra el cáncer

Gonzalo Bareño Canosa
G. Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

22 feb 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Esperanza Aguirre no es la primera dirigente que anuncia su retirada momentánea de la primera línea política para hacer frente al cáncer. El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, anunció en el 2008 que se le había detectado un tumor en un pulmón. Fue operado con éxito y pudo reintegrarse a su cargo en el Parlamento, que sigue ejerciendo en la actualidad.

Poco antes, en el año 2007, fue la entonces presidenta del PP en el País Vasco María San Gil la que anunció que se le había detectado un cáncer de mama, el mismo que padece Aguirre. La dolencia le impidió participar en la campaña electoral de aquel año. Tras reincorporarse meses después a su puesto, fue sustituida, por otros motivos, por Antonio Basagoiti. El actual alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, del PNV se sometió a una operación por un cáncer de próstata tras ganar los comicios del 2003. Tras volver a su puesto, ganó de nuevo en el 2007. Un cáncer de próstata apartó también del escaño al diputado aragonés José Antonio Labordeta y acabó finalmente con su vida en el 2010. A la teniente alcalde del PSdeG en Pontevedra Teresa Casal se le extirpó un tumor en un pecho en diciembre del 2010 y pudo reintegrarse a sus funciones un mes más tarde.