Rubalcaba ya prepara las elecciones

Enrique Clemente Navarro
Enrique clemente MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Anuncia que abandona los tres cargos que tenía en el Gobierno para concentrase en su trabajo como candidato a unos comicios que probablemente se adelanten al otoño

09 jul 2011 . Actualizado a las 10:47 h.

Alfredo Pérez Rubalcaba anuncio ayer que deja, «de forma inmediata», los tres cargos que ostenta en el Gobierno (vicepresidente, ministro del Interior y portavoz) para dedicarse exclusivamente a preparar las elecciones. Así se lo transmitió por la mañana a José Luis Rodríguez Zapatero, que deberá remodelar su Gabinete, lo que podría hacer mañana o a lo sumo el lunes o el martes. El hecho de que fuera Rubalcaba quien anunciase la crisis de Gobierno y no el presidente es totalmente inusual, pero la bicefalia ha alterado el orden lógico de las cosas.

«Es el momento y el lugar de decirlo», afirmó, aunque desveló que Zapatero conocía su decisión de abandonar el Ejecutivo desde que fue designado candidato por el partido el pasado 28 de mayo. «A partir de ahora mi compromiso como candidato dificultaría mi tarea en el Gobierno», aseguró para justificar su marcha. «Si ahora me quedara, no podría realizar como quiero mis funciones como ministro», remachó. Aunque resaltó que no había «ninguna incompatibilidad legal ni política» para ser candidato y vicepresidente, como no la hay entre ser presidente y aspirante a la Moncloa. Pero no se veía «en condiciones de dedicar todo el esfuerzo que el Gobierno exige, que es todo».

Adelanto electoral

También tiró de ironía para minimizar de antemano las posibles críticas: «Si me quedo, porque me quedo, si me voy, porque me voy, si hablo de los bancos son un izquierdista irredento». Y restó importancia a que el PP le haya pedido muchas veces que saliera del Gobierno al recordar que ya reclamó su dimisión a los seis días de ser nombrado ministro del Interior.

Aunque señaló que disolver las Cortes es una prerrogativa de Zapatero y este se ha declarado dispuesto a acabar la legislatura -pero sin hacerlo explícito en el último debate sobre el estado de la nación-, su anuncio abona la tesis de que habrá adelanto electoral al próximo otoño. Los propios socialistas habían dicho en privado que si se iba antes de las vacaciones de verano la cita con las urnas sería en octubre o, más probablemente, en el mes de noviembre.

Es indudable que la opinión del candidato será decisiva para adelantar o no los comicios, máxime cuando las reformas que quedan pendientes pueden aprobarse de aquí a septiembre. Además, la conferencia política, que se celebrará del 30 de septiembre al 2 de octubre, le dará impulso. También podría beneficiarse de la EPA correspondiente al tercer trimestre, que se espera sea muy favorable por el aumento del turismo. Sería también la manera de evitar nuevas concesiones al PNV para que respalde los Presupuestos, lo que siempre tiene un coste político.

Líneas maestras

Rubalcaba hacía este anuncio solo 24 horas antes de su proclamación como candidato por el comité federal en un acto en el que desvelará las líneas maestras de su proyecto político y en el que se espera un giro a la izquierda. Tendrá el reto de presentarse como una alternativa distinta y eficaz tras haber sido la mano derecha de Zapatero y de ilusionar a la deprimida militancia socialista después del descalabro del 22-M. Ayer no adelantó nada, aunque sí dijo que demostrará que «se puede formular un programa de gobierno que no es contradictorio» con lo que ha hecho Zapatero.

Con su abandono tendrá las manos libres. En los últimos días sus declaraciones contra los bancos fueron respaldadas con iniciativas impositivas por los ministros Valeriano Gómez o José Blanco, que la vicepresidenta Elena Salgado refutó de inmediato.