El expresidente del Gobierno considera que los socialistas han dejado España «más debilitada, más empobrecida y más entrampada que nunca».
06 oct 2011 . Actualizado a las 21:35 h.El expresidente del Gobierno José María Aznar ha señalado hoy que es hora de que el PP vuelva al Gobierno para acabar con el «meteorito» de los socialistas, que han dejado España «más debilitada, más empobrecida y más entrampada que nunca» y ha sentenciado: «es tiempo de Mariano Rajoy».
Aznar ha participado esta tarde en la apertura de la convención nacional del PP, en un discurso en el que ha subrayado que la primera reforma que tendrá que hacer su partido cuando gane las elecciones será «la revolución de la normalidad» tras ocho años de «frivolidad, extremismo e irresponsabilidad» por parte del PSOE.
El presidente de honor del PP ha dicho que la herencia que va a recibir Mariano Rajoy es «mucho peor» que la que tuvo él cuando llegó a La Moncloa en 1996, pero ha expresado su confianza en el partido para volver a poner a España «en el camino del éxito» y sacarla «del paro masivo, del retroceso social y del deterioro institucional».
Además, ha subrayado su apoyo y su confianza en Rajoy, cuya «serenidad, experiencia y buen sentido» son «sólidos avales» para que España recupere la confianza perdida, y suponen «la primera garantía para el Gobierno que necesita» el país.
José María Aznar ha dedicado la mayor parte de su discurso a criticar a los socialistas, que «pretenden simular que se ha estrellado sobre España un meteorito en forma de crisis financiera internacional», cuando en realidad, ha apuntado, «el meteorito son ellos mismos».
«Nos salen siempre muy caros», porque «nos arruinan el presente y nos hipotecan el futuro», ha continuado Aznar al hablar de los socialistas, que en esta ocasión, ha añadido, dejan «una ruina económica y social como no había dejado nadie nunca».
«La burbuja socialista ha estallado», ha insistido el ex presidente, para quien los españoles ya han «desenmascarado» el «juego de engaños» del partido en el Gobierno.
Por el contrario, ha señalado, los populares no se tienen que esconder tras sus siglas ni se tienen que «disfrazar» para pedir el voto, porque sí son «simpatizantes» de sus propias ideas y están «dispuestos a decir la verdad y a hacer las reformas que España necesita».
La primera de esas reformas, en su opinión, debe ser la de «recuperar la normalidad», o en otras palabras poner en marcha la «revolución de la normalidad».
«Lo normal», entre otras cosas, es «no gastar más de lo que se ingresa»; que los jóvenes «tengan perspectivas de empleo y de futuro»; que se aliente a los emprendedores o que el Estado funcione «con lealtad institucional, cooperación y austeridad», ha dicho.
Y lo normal también es, ha añadido Aznar, «trabajar por la derrota de los terroristas», o «asentar el Estado autonómico y no alimentar la deriva de diecisiete estados inviables».
Aznar ha señalado que es tiempo de la «política con mayúsculas» y de conseguir en las urnas un amplio respaldo para acometer con la máxima urgencia las reformas necesarias.
«Es tiempo de Mariano Rajoy», ha concluido el ex presidente, despedido por los aplausos con el plenario de la convención en pie, de la misma forma que ha sido recibido.