Varios testigos afirman que Urdangarin no rompió con Nóos tras el aviso del Rey

Iñaki Urdangarin no se desvinculó del Instituto Nóos en marzo del 2006 tal y como le pidió la Casa Real, aseguró el duque en su comparecencia ante el juez del Caso Palma Arena. Esa es al menos la versión que dieron este jueves algunos de los primeros de la cuarentena de testigos que declararán hasta el sábado en la Ciudad de la Justicia de Barcelona ante el juez José Castro, que investiga las presuntas actividades irregulares de Diego Torres e Iñaki Urdangarin al frente del Instituto Nóos.

Empleados y proveedores de Nóos que acudieron a declarar corroboraron además que tanto Urdangarin como Torres, imputados por los presuntos delitos de malversación de caudales públicos, fraude, falsedad documental y prevaricación, ejercían de «jefes» al mismo nivel en la entidad sin ánimo de lucro, un extremo que el duque de Palma negó en su día, ya que reconoció ejercer labores de representación, pero no de gestión y de contabilidad.

Entre los testigos que expresaron que Urdangarin estaba al frente de Nóos y que su vínculo con la entidad se prolongó más allá de marzo del 2006 está Marcel Planellas, exsecretario general de Esade y actual profesor de la escuela de negocios. Planellas, que dimitió en marzo de este año, una vez que su nombre apareció relacionado con la investigación del caso, volvió a ratificar que realizó labores de asesoramiento para Nóos. Al parecer, la entidad quiso cobrar hasta tres veces presentando una factura de Planellas a la Generalitat Valenciana, al Gobierno balear y a los Juegos Europeos de Valencia, de ahí que buena parte de las preguntas del juez y del fiscal, tanto a Planellas, que entre el 2004 y el 2007 cobró más de 128.000 euros de las empresas que controlaba Urdangarin, como al resto de proveedores, persiguiera recabar información sobre la autenticidad de las facturas y la veracidad de los servicios prestados. Y es que, se sospecha que Nóos habría aprovechado facturas de sus proveedores para luego duplicarlas o triplicarlas. Planellas reconoció además que recibió como honorarios por su trabajo en Nóos un coche de alta gama que pagó en régimen de Renting hasta el 2008 la empresa Aizoon, propiedad de Urdangarin y la infanta Cristina.

También declaró este jueves Roberto Molina, amigo personal de Urdangarin y regatista campeón olímpico en los Juegos de Los Ángeles. Molina, ingeniero informático, que trabajó para Nóos en el diseño de una red informática, declaró que solo prestó servicios en Barcelona, a pesar de que en el sumario constan facturas en Valencia o Baleares. Sus facturas habrían servido, otra vez, para justificar gastos de Nóos.

Las comparecencias de los testigos continuarán este viernes, cuando está llamada a declarar Julita Cuquerella, secretaria personal del duque de Palma, que deberá explicar el ya célebre post-it que le incautó la Policía en un registro, en el que aparecían apuntados el nombre de una empresa y una cuenta en Suiza. Asimismo, la comitiva judicial que se ha desplazado a la capital catalana tomará declaración el sábado a la exconsejera catalana de Sanidad, Marina Geli.

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