Don Juan Carlos descarta la abdicación

La Voz

ESPAÑA

20 abr 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

El rey reaccionó con rapidez, contundencia y humildad después de que se supiera que se había roto la cadera durante su estancia en Botsuana para participar en un safari, plenamente consciente de que debía tomar la iniciativa y disculparse porque su figura y la monarquía misma nunca habían sido tan cuestionadas. Pero sabe que no es suficiente y debe abordar cambios más profundos. Más transparencia y mayor información sobre su agenda privada. Cree que ese el camino para recomponer la situación. Pero el caso Urdangarin y los correos electrónicos presentados al juez por su exsocio, que mostrarían supuestas gestiones en favor de su yerno, enturbian el futuro próximo. La declaración de Diego Torres ante el juez prevista para el 22 de mayo está marcada en rojo y podría ser un punto de inflexión.

Pero, confrontado a la peor situación de su reinado, al margen del 23-F, por su cabeza no pasa tirar la toalla. Además de esas once palabras que han sido tan analizadas por los especialistas como fueron estudiadas previamente por el monarca, este pronunció otra frase clave. Señaló que estaba deseando retomar sus obligaciones, con lo que dejaba claro que no piensa en abdicar en don Felipe, otro de los grandes debates abiertos a raíz del episodio africano. Al menos de momento.

Pero el rey está muy preocupado por el desgaste de la institución, que puede afectar también a su hijo. Ese fue uno de los motivos de que pidiera perdón. Don Felipe estuvo totalmente de acuerdo con la iniciativa que su padre tomó ya el lunes, consciente de que la situación se le podía ir de las manos, pues el asunto no solo había provocado numerosas críticas en España, sino traspasado fronteras, ya que había sido reflejado por los medios internacionales. Ayer, los grandes periódicos europeos, británicos, alemanes e italianos destacaron la histórica disculpa, aunque algunos volvían a incidir en la crisis de la monarquía española.