Los pilotos presionan para que Fomento intervenga en el conflicto de Iberia

m. costoya REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

Kote Rodrigo / EFE

El Sepla reclama al Gobierno un arbitraje para poner fin a la huelga

24 abr 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

El conflicto que mantienen los pilotos y la dirección de Iberia parece lejos de resolverse. Ayer, tras una nueva jornada del calendario de paros establecido por el Sepla hasta el próximo 20 de julio, el sindicato que representa a los pilotos reclamó la intervención de Fomento. El portavoz del Sepla, Justo Peral, considera como única solución para poner fin a la huelga acudir a un arbitraje que determine la aplicación de un laudo de obligado cumplimiento por las partes, ya que las negociaciones con la compañía son prácticamente inexistentes.

El Gobierno mantuvo una reunión la semana pasada con el sindicato de pilotos y la empresa para intentar que acercaran posturas. A su término, la ministra de Fomento, Ana Pastor, señaló que era mejor «un mal acuerdo que un buen laudo» y que intervendría si no se llegaba a una solución en el corto plazo. Ni la compañía ni los pilotos han recibido todavía ninguna indicación del Gobierno.

El exministro Manuel Pimentel, que fue mediador entre Iberia y los pilotos hace unas semanas, advirtió que «la huelga es muy mala para la compañía, porque va a perder mucho dinero, pero también para los pilotos. El conflicto desangra a las dos partes y tendrán que ponerse de acuerdo porque si no será un suicidios», recalcó en una entrevista radiofónica.

El conflicto que enfrenta a los pilotos con la compañía se centra en la creación de la nueva filial de bajo coste Iberia Express, que según el Sepla vulnera el convenio de los pilotos en varios puntos, entre ellos, que haya segregación de actividad de la empresa matriz, tal como recoge el acuerdo firmado con la empresa. «Nosotros estamos dispuestos a realizar grandes sacrificios», explicó ayer Justo Peral, quien recordó que los pilotos propusieron hace meses a la empresa una reducción de un 50 % de sus costes salariales y un aumento del 25 % de su productividad, una oferta que la empresa rechazó. Por ello, Peral expresó su sorpresa por la decisión tomada el pasado día 16 por Iberia de rebajar un 12 % el sueldo de pilotos y un 8 % más en otros complementos retributivos aprovechando la reforma laboral aprobada en febrero.

Dinamitar el convenio

El Sepla mantiene que la única pretensión de Iberia es dinamitar el convenio colectivo que se firmó en el 2009, antes de la fusión de esta compañía con British Airways. En este acuerdo se blinda el aeropuerto de Barajas ante la entrada de otras empresas aéreas y establece que su gestión solo podrá ser realizada por la compañía española.