El presidente del Gipuzko Buru Batzar el PNV, Joseba Egibar asegira que supondrá un nuevo tiempo de gestión
20 oct 2013 . Actualizado a las 20:58 h.El presidente del Gipuzko Buru Batzar el PNV, Joseba Egibar, ha asegurado que una resolución del Tribunal de Europeo de Derechos Humanos (TEDH) contraria a la doctrina Parot «oxigenaría» el ambiente político, en la actualidad «un poco pesado».
De forma previa al inicio de un acto de celebración del centenario del PNV en Eskoriatza (Guipúzcoa), en el que también ha participado el presidente del Euskadi Buru Batzar (EBB) del PNV, Andoni Ortuzar, Egibar se ha referido a la resolución que se espera este lunes, por parte del Tribunal de Estrasburgo, sobre la 'Doctrina Parot' en el caso de la presa de ETA Inés del Río.
El líder jeltzale ha esperado una sentencia «de anulación» que sirva para «oxigenar el ambiente» y entrar «en un nuevo tiempo». «Si la sentencia es de anulación, nosotros sí creemos que va a contribuir a oxigenar un ambiente que está realmente pesado, sobre todo lo que circundan los juicios, macrojuicios, revisiones de sentencias, etc», ha afirmado.
A su juicio, es preciso «entrar en un nuevo tiempo de gestión y administración de toda la cuestión penitenciaria». Ha afirmado que, hasta no conocer la sentencia del TEDH, la formación jeltzale no se pronunciará al respecto, pero ha deseado un fallo contrario a la doctrina, que «supondrá una oxigenación de este ambiente tan cargado».
Históricos jefes etarras podrían salir
Algunos de los presos a los que afectará la decisión del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) de Estrasburgo sobre la 'Doctrina Parot' son históricos jefes etarras tanto del aparato político, como militar o logístico de la banda que han mantenido un alto grado de influencia dentro y fuera de las prisiones a pesar de los años de reclusión. Dirigentes como Santi Potros, Txikierdi o Josu Amantes forman parte de este grupo que podrían ir saliendo de prisión.
Según han informado fuentes del Ministerio del Interior, son 61 etarras los que irían quedando en libertad en los próximos meses en el caso de que el tribunal internacional derogase la doctrina. Posteriormente el Departamento que dirige Jorge Fernández Díaz cuenta con otro grupo de otros 75 presos terroristas que abandonarían la cárcel en pocos años.
Por su parte las listas con las que cuentan las plataformas de apoyo a los presos de ETA como Etxerat sitúan la cifra en 71 presos, de los cuales 52 ya estarían en libertad si no se les hubiese aplicado la doctrina 197/2006. Además recuerdan que ya hay otros 22 internos terroristas en libertad que vieron retrasada su salida de prisión por esta norma.
En estos listados figuran pesos pesados de la banda con una intensa actividad criminal que tras su arresto siguieron ejerciendo una ascendencia relevante en el Colectivo de Presos de ETA (EPPK por sus siglas en euskera) uno de los eslabones más influyentes del mundo etarra. Entre ellos está Juan Lorenzo Lasa Mitxelena, alias 'Txikierdi'.
Beneficiado por la Amnistía del 77, fue 'jefe de comandos', integró el 'comando de Madrid' y el 'aparato de seguridad' contra los GAL entre otras funciones. Con seis asesinatos y 374 años de condena ingresó en prisión donde durante años ejerció como portavoz del Colectivo de Presos, una función que abandonó en 2011.
Santiago Arrospide
Santiago Arrospide Sarasola, alias 'Santi Potros' es otro de este perfil de etarras. Condenado como inductor del atentado contra el Hipercor de Barcelona fue jefe del aparato 'militar' de ETA. En marzo de 2009 fue acercado desde la cárcel de Puerto I (Cádiz) --donde se agrupa a los etarras más irredentos-- hasta la prisión zaragozana de Zuera. En aquella época el penal aragonés era el laboratorio en el que Interior trasladaba a los etarras que daban signos de distanciarse de ETA y por esa misma razón eran señalados por el entorno de la banda. Pese a ello, 'Santi Potros' nunca fue expulsado del Colectivo como sí sucedió en otros casos.
Iñaki Arakama Mendía, alias 'Makario', es otro histórico de ETA al que se le aplicó la 'doctrina Parot' tras un pasado sangriento como militante de ETA. Ya en prisión, en el año 2005 firmó junto a otros presos relevantes como Francisco Mújica Garmendia, alias 'Pakito', una carta en la que planteaba el abandono de las armas. Se trataba de una época todavía en la que esos planteamiento se entendían como un desafió a la organización criminal, que continuaba con los atentados. Pese a ello tampoco fue expulsado.
También está Josu Amantes Arnaiz, alias 'Txirlas', quien formó parte del 'aparato político' desde 1986 hasta su detención en 1992, una de las etapas más sangrientas. En aquellos años los ascensos en la banda no eran tan meteóricos como han sido en la última época en la que la ausencia de militantes y los sucesivos golpes policiales obligaban a rellenar puestos vacantes con militantes de escasa trayectoria y preparación.
Otros nombres relevantes son el de Jesús María Mendinueta Flores, jefe del 'comando Vizcaya' de ETA desarticulado en 1991 o José Javier Zabaleta Elósegi, alias 'Baldo', considerado el 'números dos' de ETA y jefe del 'aparato logístico' hasta su arresto en 1990.
La 'doctrina Parot' fue introducida en 2006 por el Tribunal Supremo y establece que las redenciones de pena deben aplicarse sobre el total de la condena impuesta y no sobre el límite máximo de cumplimiento de 30 años. De este modo se evitó que numerosos etarras como estos o delincuentes graves quedasen en libertad mucho antes de agotar su condena.
Fuentes de la lucha antiterrorista consultadas por Europa Press se muestran interesados en conocer el acople que tendrían de forma repentina terroristas de vieja guardia en la actual izquierda abertzale y la influencia que su autoridad podría tener en futuras estrategias o si aceptarán las directrices de sus nuevos dirigentes con una «hoja de servicios» a la causa mucho más reducida.
MÁS DE 40 CON DELITOS DE SANGRE
Además de los ya citados hay más de 40 terroristas que podrían salir de prisión que cuentan con numerosos delitos de sangre. En este grupo destacan Domingo Troitiño con 22 asesinatos en su 'curriculum' criminal entre atentados con resultado de muerte y asesinatos directos. Por estos crímenes ha cumplido 26 años de cárcel, apenas un año y un mes por cada asesinato.
Por su parte, el etarra Juan Carlos Arruti Azpitarte cuenta con 24 asesinatos por los que lleva 24 años en prisión. En su caso la media sale a un año exacto por cada vida. También hay 6 miembros de los GRAPO, uno de los GAL, otro independentista gallego así como 15 violadores y otros delincuentes graves.
Fue el pasado mes de marzo cuando la Gran Sala del Tribunal Europeo de Derechos Humanos en Estrasburgo acogió la vista sobre el 'caso Inés del Río'. España estuvo representada por la Abogacía del Estado Isaac Salama, quien se preguntó ante los 17 jueces del tribunal si «¿es igual un asesinato que 132?».
En primer momento se barajó que la sentencia pudiese conocerse en el mes de julio, posteriormente se vaticinó un veredicto para el mes de septiembre, pero finalmente se producirá en octubre, un retraso que fuentes conocedoras del funcionamiento de este tribunal entienden como una prueba de la falta de acuerdo, lo que iría en contra de los intereses del Gobierno.