Piden la imputación del primogénito del expresidente porque creen que gestionaba la herencia oculta en Andorra
03 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El presidente de la Generalitat, Artur Mas, comparecerá el próximo 9 de febrero en la comisión de investigación sobre el fraude fiscal y el caso Pujol que se celebra en el Parlamento catalán. Mas, que la semana pasada se vio obligado a solicitar la declaración a la presidenta de la Cámara autonómica, después de que Esquerra forzara su presencia, reclamó que su declaración fuera lo antes posible. Los partidos de la oposición, en cambio, querían que fuera más allá del 23 de marzo, pues entendían que resultaba más útil escuchar primero a toda la familia Pujol y luego a Mas. El expresidente de la Generalitat, su esposa, Marta Ferrusola, y uno de sus hijos, Jordi Pujol Jr., deberán acudir a declarar el 23 de febrero. Los otros seis hijos del matrimonio Pujol Ferrusola han sido citados para el 9 y el 16 de marzo.
Finalmente, la comisión de investigación ha decidido que Mas acuda el 9 de febrero, gracias a los votos de CiU y ERC, que en este caso han ido de la mano, después de semanas de desencuentros, precisamente por el cambio de actitud de los republicanos, que durante cuatro votaciones salvaron a Mas de tener que comparecer y que tras hacerse públicas unas conversaciones del sumario del caso de las ITV decidieron pedir la presencia de Mas. CiU no quería que Mas compareciera, pero ha conseguido que lo haga lo más lejos posible del período electoral.
El anuncio de la comparecencia coincide en el tiempo con la presentación por parte del sindicato Manos Limpias en un juzgado de Barcelona de un escrito en el que pide la imputación de Jordi Pujol Ferrusola en el sumario que investiga la fortuna oculta en el extranjero por la familia y en el que ya están imputados sus padres y tres de sus hermanos por delitos fiscales y blanqueo de capitales. Manos Limpias decidió reclamar la imputación del primogénito después de que el pasado 27 de febrero, su padre y sus hermanos Marta, Mireia y Pere apuntaran que Jordi Pujol Ferrusola gestiona desde 1990 el «legado» en Andorra que supuestamente les habría dejado su abuelo, Florenci Pujol.
Por varias manos
De acuerdo con la versión del expresidente, que dijo que jamás quiso saber nada de ese dinero, en principio fue su amigo Delfí Mateu, el que se encargó del día a día de las cuentas en el extranjero. Cuando Mateu murió fue Joaquim Pujol Figa, primo del exjefe de Gobierno catalán, el que gestionó la fortuna durante unos meses, hasta que tomó el testigo en esas funciones Jordi Pujol Ferrusola. Mireia Pujol llegó a afirmar en el juzgado que el mayor de sus hermanos, ya imputado en la Audiencia Nacional por el supuesto cobro de comisiones a cambio de adjudicaciones de obras por la Generalitat, era la persona que ordenaba a la familia cómo y cuándo hacer los ingresos y retirar dinero de las cuentas de Andorra.