El Consejo Fiscal dirime el futuro de Moix en plena tormenta por la operación Lezo

M. B. MADRID / COLPISA

ESPAÑA

MIGUEL ANGEL MOLINA | EFE

El fiscal jefe anticorrupción se encuentra en la cuerda floja por la operación Lezo y entre críticas internas por el relevo de los fiscales en el caso del 3 % de Convergència

03 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El fiscal jefe anticorrupción, Manuel Moix, se encuentra en su momento más bajo. En la cuerda floja por la operación Lezo y entre críticas internas por el relevo de los fiscales en el caso del 3 % de Convergència. Con esta tormenta de fondo, que lejos de amainar sigue golpeando la imagen de la Fiscalía y reforzando la creencia en la falta de independencia de Moix, el Consejo Fiscal se reúne hoy y mañana con un orden del día que incluye la revisión y votación de las polémicas decisiones del fiscal jefe sobre estos dos asuntos.

El pleno del Consejo Fiscal, órgano consultivo del fiscal general José Manuel Maza, está formado por 12 miembros, nueve de los cuales los elige la carrera y los tres restantes son el propio fiscal general, el teniente fiscal del Tribunal Supremo (Luis Navajas) y el fiscal inspector jefe (Fausto José Cartagena). De los fiscales electos, seis pertenecen a la Asociación de Fiscales (AF, de perfil conservador) y tres a la Unión Progresista de Fiscales (UPF). El primer colectivo tiene el control del Consejo Fiscal, ya que sus acuerdos se adoptan por mayoría simple y, en caso de empate, el presidente tiene voto de calidad. Pese al respaldo previo dado por la Asociación de Fiscales a Manuel Moix, esta vez se expone al pleno del Consejo Fiscal con la posibilidad de debilitar aún más su posición si no recibe un apoyo unánime de sus compañeros, como todo parece indicar. La razón es que los tres fiscales de la UPF quieren castigar a Moix. «Algunos interpretan la Fiscalía como un rebaño con un pastor que es el fiscal jefe y otros la entendemos como una orquesta de solistas con un director», criticó su presidente, Álvaro García Ortiz.