Aznar avala a Rivera como alternativa de gobierno «centrista, moderada y liberal»
ESPAÑA
El Instituto Atlántico del expresidente convierte al líder de Ciudadanos en protagonista de su máster de liderazgo
09 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.José María Aznar volvió ayer a evidenciar su distanciamiento de Mariano Rajoy al presentar a Albert Rivera como la alternativa de renovación «centrista, moderada y liberal» de la política española. Fue durante la clausura del máster del Instituto Atlántico de Gobierno (IAG), un centro privado dedicado a la formación de líderes políticos españoles y latinoamericanos con el que el expresidente aspira a reforzar, a largo plazo, los cada vez más vaporosos vínculos institucionales entre España y América. En realidad, no fue el propio Aznar, sino Gabriel Elorriaga, profesor del IAG y uno de sus hombres de máxima confianza, quien elogió, en la presentación del político catalán a los alumnos, su «notable éxito» en las elecciones generales y su oferta política alejada de «la radicalidad y el extremismo». Elorriaga, quien en el 2008 cuestionó públicamente el liderazgo de Rajoy, tras cuatro años como portavoz del PP, destacó, además, la defensa de «la unidad de España» del líder de Ciudadanos ante el reto independentista en Cataluña.
El reconocimiento del instituto de Aznar a Rivera -invitado de honor en el cierre de la II Semana Atlántica, en la que también han ofrecido clases magistrales políticos como el ex secretario general de la OTAN Anders Fogh Rasmussen- se produce en un momento de especial tensión entre el PP y su socio de investidura, a raíz de la investigación parlamentaria de la caja B de Génova. La alianza de Ciudadanos con el PSOE y Podemos en el asunto ha enfurecido a los populares, que han acusado a Rivera de echarse en manos del extremismo. El dirigente liberal aprovechó, de hecho, su intervención para lanzar un mensaje a los populares y recordarles que «no solo hay que quejarse de la corrupción sino que hay que hacer cosas contra ella».
Con Aznar en primera fila, Rivera disertó sobre el liberalismo y las reformas que necesitan España y la UE. En su opinión, frente al socialismo y los conservadores, la opción liberal es la única capaz de combatir ideológicamente al populismo y los nacionalismos, no solo «con críticas», sino desde la acción. El líder centrista dibujó una España sin rumbo definido y alertó sobre la necesidad de «volver a ilusionar» a los ciudadanos con un proyecto «sin complejos y con valores patrióticos», que trabaje para la recuperación de la clase media y fomente la regeneración. A su juicio, en 40 años de democracia solo tres presidentes del Gobierno han logrado algo así: Adolfo Suárez en la transición, Felipe González con la modernización y los avances en justicia social de los ochenta, y Aznar con el impulso económico de los noventa.