El Gobierno ningunea al Supremo y asegura que Franco será exhumado el 10 de junio

ander azpiroz MADRID / COLPISA

ESPAÑA

Panteón de la familia Franco en el cementerio de Mingorrubio, en El Pardo
Panteón de la familia Franco en el cementerio de Mingorrubio, en El Pardo EUROPA PRESS

Anuncia que los restos serán trasladados desde el Valle de los Caídos hasta El Pardo

16 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El Consejo de Ministros dio este viernes el último paso administrativo para exhumar a Francisco Franco al fijar la fecha y el lugar adonde pretende que sean trasladados los restos. «La reinhumación será el 10 junio e irá al panteón de Mingorrubio de El Pardo», anunció Carmen Calvo. La número dos del Ejecutivo añadió que no habrá imágenes del acto ni convocatoria pública de la exhumación. Calvo se limitó a detallar que la operación se llevará a cabo por la mañana y que se ofrecerá a la familia la posibilidad de asistir a la exhumación en la abadía y de oficiar una misa íntima en Mingorrubio.

El hecho de que el 10 de junio caiga en lunes no es una casualidad, ya que ese día de la semana el Valle de los Caídos permanece cerrado al público, lo que facilitaría el despliegue de las fuerzas de seguridad para evitar posibles incidentes. Ahora bien, una cosa son las intenciones del Gobierno socialista y otra que las pueda hacer realidad. Pero, de concretarse finalmente, el proceso se habrá prolongado casi un año. Sobre el futuro uso del Valle de los Caídos, la vicepresidenta abogó por «ir por partes». «Lo urgente es sacar los restos del dictador», zanjó. 

Oposición de la familia y el prior

La oposición de los descendientes de Franco es el gran obstáculo para la exhumación, que ya ha sido recurrida ante el Supremo. El alto tribunal podría decidir paralizar la operación mientras adopta una decisión. «Acataremos las resoluciones judiciales, pero eso no impide que el Gobierno concluya el proceso legal que inició», justificó la vicepresidenta tras la reunión semanal del Gabinete. «La familia y su entorno -añadió Calvo- han utilizado los procedimientos procesales para articular su discrepancia de aplicación de la ley». Los nietos de Franco respondieron a las pocas horas que «el Gobierno no puede ejecutar la exhumación si el Tribunal Supremo no se pronuncia». La familia rechaza que se saque a su abuelo del mausoleo que mandó construir tras las Guerra Civil. Y si esto se produce, exige trasladar los restos a la catedral de La Almudena. Pero esta es una posibilidad que el Ejecutivo rechaza por motivos de seguridad y para no dar pie a que haya un centro de exaltación del franquismo en el centro de la capital. Es por esto que el Gobierno ha escogido el panteón de Mingorrubio, donde está la tumba de la viuda del dictador, Carmen Polo, y que además es propiedad de Patrimonio Nacional, algo que evita más problemas administrativos y de orden público porque está en un lugar aislado.

Otro obstáculo es el prior del Valle de los Caídos, que amenaza con prohibir la entrada a la basílica donde está la tumba. El Vaticano ha dicho que la Iglesia no interferirá en el proceso, pero el jefe de los benedictinos que resguardan el mausoleo amenaza con no darse por enterado. Los religiosos presentaron el pasado martes su propio recurso ante el Supremo. 

Un juez, otro obstáculo

A ello se suma que un controvertido juez de Madrid ha negado la licencia de obra para levantar la lápida, de tonelada y media de peso, bajo el argumento de que se pondría en riesgo la vida de los operarios. Otro problema que podría presentarse para la exhumación sería un cambio de Gobierno tras el 28 de abril. Con una alianza de PP, Ciudadanos y Vox el traslado de los restos de Franco entraría en un paréntesis porque ninguna de las tres formaciones es partidaria de la exhumación. Pero lo más probable es que para esas fechas el Gobierno de Sánchez siga en funciones. Según apuntó este viernes Calvo, «cualquier Gobierno que esté el 10 de junio, a menos que haya modificado la norma que obliga a hacerlo, lo tendrá que hacer».

«Es un manoseo de la memoria histórica por motivos electorales», afirma Podemos 

«Afortunadamente para el empleo, para el progreso, para España y para todos el 10 de junio no estarán en el Gobierno». Es la reacción del secretario general del PP, Teodoro García Egea, en referencia al PSOE después de que el Gobierno anunciara que prevé exhumar a Franco ese día.

Por su parte, Vox espera que el Supremo resuelva en contra de la exhumación del dictador del Valle de los Caídos y su traslado al cementerio de El Pardo. «El Gobierno miente. No se atreverá a profanar una sepultura. Franco solo saldrá del Valle de los Caídos si así lo decide el Supremo», ha publicado el partido de Santiago Abascal en Twitter. Y ha expresado su deseo de que «la Justicia deje a los muertos en paz».

Las críticas al anuncio también han llegado desde la izquierda. Podemos habla de la «tomadura de pelo» que supone, a su juicio, el «enésimo» anuncio del Gobierno. El secretario general, Pablo Iglesias, ha criticado el hecho de que a pesar de que el Ejecutivo de Sánchez se comprometió «a sacar al dictador del Valle de Los Caídos», ahora diga «que el próximo Gobierno a lo mejor lo hace». El secretario de organización, Pablo Echenique, ha añadido que, además, el anuncio supone «un manoseo de la memoria histórica por motivos electorales» que «no se merecen las víctimas de la dictadura y sus familiares».