El retorno de Albiol siembra dudas en la estrategia electoral del PP catalán

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

García Albiol toma un taxi tras pasar por la sede de Cáritas, en su primera visita oficial como alcalde de Badalona
García Albiol toma un taxi tras pasar por la sede de Cáritas, en su primera visita oficial como alcalde de Badalona Quique Garcia | Efe

Después de ser repudiado por Casado, se convierte en la figura más visible del partido

14 may 2020 . Actualizado a las 08:48 h.

El PP catalán lleva décadas inmerso en un carrusel de cambios de liderazgo, vuelcos en el discurso y vaivenes electorales. Y, cuando parecía que la llegada a la cúpula de Alejandro Fernández podría servir para reunificar el partido y calmar las aguas, la carambola que ha llevado a su predecesor, Xavier García Albiol, a recuperar la alcaldía de Badalona, amenaza con enturbiar de nuevo la estabilidad de la formación y modificar la hoja de ruta de cara a unas elecciones catalanas que aún no se han convocado.

Tras el fracaso en las pasadas autonómicas, en las que el PP pasó de 11 diputados a 4 y se quedó sin grupo parlamentario, Albiol ofreció su dimisión. Pero Mariano Rajoy le pidió que siguiera hasta encontrar un relevo. Después, cuando en el 2018 Alejandro Fernández alcanzó el liderazgo, renunció a su escaño y pasó a hacer la guerra por su cuenta, centrado en recuperar la alcaldía de Badalona. Se alejó de Pablo Casado, que ni siquiera le pidió que interviniera en la campaña de las generales de abril del 2019, e hizo luego campaña en las municipales sin las siglas del PP. Llegó incluso a cuestionar al líder popular por sus alianzas con Vox. Era ya, de hecho, un político marginal en el partido. Un apestado. Y ahora, de pronto, se convierte en el político del PP catalán con más proyección pública gracias a la alcaldía de la cuarta ciudad más poblada de Cataluña.

El nuevo protagonismo de Albiol devuelve la incertidumbre a un partido en el que un sector, entre el que se encuentra el candidato a la alcaldía de Barcelona, el empresario Josep Bou, cuestiona la posición radicalmente españolista impuesta en el partido por la diputada por Barcelona Cayetana Álvarez de Toledo

«Más de Badalona que del PP»

Albiol ha olvidado su discurso antiinmigración y apuesta por rentabilizar ahora las ayudas a los más afectados por la crisis económica originada por el covid-19. Pero, de momento, sigue marcando distancias con su propio partido, para evidenciar que su retorno a la alcaldía es el triunfo personal de un candidato que, pese al ostracismo en su formación, ganó de nuevo las elecciones en Badalona, aunque no pudo hacerse con la alcaldía porque el PSC pactó entre otros con la CUP, y ahora triunfa en una moción de censura. «Soy más militante de Badalona que de mi partido». Eso es lo primero que ha dicho Albiol tras hacerse con el bastón de mando de la alcaldía.

Pese a la precariedad de su situación, y a que la oposición podría plantearle en cualquier momento una nueva moción de censura, Albiol tiene grandes posibilidades de mantenerse en el cargo por las fuertes discrepancias entre Dolors Sabater, anterior alcaldesa y candidata de Guanyem, marca de la CUP en Badalona, con el PSC, ERC y los Comunes de Colau, que han pedido su dimisión. Los socialistas están debilitados por el escándalo protagonizado por el anterior alcalde, Alex Pastor, al enfrentarse a la policía en estado de embriaguez tras saltarse el confinamiento por el covid-19 .

Así las cosas, Albiol puede ser la figura más visible del PP catalán hasta las municipales del 2023. Pero antes tendrán que celebrarse unas catalanas en las que el partido deberá decidir si explota electoralmente su figura o lo mantiene como un apestado.