González Laya asegura que la postura de España sobre el Sáhara «no ha cambiado ni va a cambiar»

Redacción MADRID | LA VOZ

ESPAÑA

Juan Carlos Hidalgo | EFE

Marruecos acusa a España de tratar de europeizar una crisis bilateral

09 jun 2021 . Actualizado a las 18:38 h.

La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, defendió este miércoles en el Congreso de los Diputados que la postura del Gobierno respecto al Sáhara Occidental «no ha cambiado ni va a cambiar; no difiere en nada de lo que dicen las resoluciones de Naciones Unidas», dijo a preguntas formuladas por diputados del PP y EH Bildu en la sesión de control al Ejecutivo en la Cámara Baja.

En plena crisis diplomática con Marruecos surgida a raíz de la atención médica prestada al líder del Frente Polisario en España y tras la que se desató el caos, González Laya daba a entender así el reconocimiento de la soberanía del reino alauita sobre esta antigua colonia española sobre la que el Frente Polisario reclama la independencia. El Sáhara Occidental es un territorio extenso, equivalente en superficie a tres veces el tamaño de Andalucía. En gran parte es arena del desierto, de ahí que esté tan poco poblado, pero dispone de grandes reservas de fosfato y uno de los bancos pesqueros más sustanciosos del planeta.

Al poco de registrarse esta aclaración de Laya en las Cortes, el delegado del Frente Polisario en España, Abdulah Arabi, aseguró a Efe que la posición del Gobierno con respecto al Sáhara Occidental es «insuficiente», ya que Marruecos «va a seguir intentando deshacerse de sus compromisos internacionales».

La titular de Exteriores, a la que ciertos sectores de Moncloa la señalan como responsable directa de la crisis abierta con Marruecos en la que se encuentra inmersa España, recordó que la política española sobre el Sáhara fue refrendada hace tan solo un par de meses en una moción apoyada por ocho grupos en el Senado, incluidos el PP y Bildu.

Para el PP, la crisis con Marruecos es el último capítulo de una serie de «líos» en política exterior con los que el Gobierno «ha dilapidado nuestra credibilidad», aseguró ayer la diputada popular Valentina Martínez.

Críticas desde Marruecos

Por otra parte, el ministro marroquí de Exteriores, Naser Burita, afirmó ayer que el Gobierno español «trata de europeizar una crisis que es bilateral» entre Marruecos y España y que «no terminó el 1 de junio» con la salida del territorio español del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali.

«La crisis está ahí porque siguen sus causas profundas». Hasta en cuatro ocasiones repitió Burita que «la crisis es bilateral» y «política», mientras que España «trata de europeizarla y desviarla de sus causas conocidas, cada vez reconocidas por más actores», dijo, según recoge la agencia Efe en un teletipo.

«El fondo es la coherencia entre los actos y las palabras sobre el separatismo», afirmó el ministro marroquí, al entender que «no se puede prohibir el separatismo en tu país (por Cataluña) y fomentarlo en el vecino».

Uso de menores

Por otra parte, los cuatro grupos principales del Parlamento Europeo acordaron ayer que la resolución que el pleno votará este jueves sobre el uso de menores por parte de Marruecos en la reciente crisis migratoria condene «el uso de los controles fronterizos, la migración y los menores no acompañados» como «presión política».